El malaguismo está ilusionado. Y prueba de ello fueron las largas colas que se registraron en la jornada de ayer con la llegada del primer día de agosto. Pese a las altas temperaturas, las taquillas de La Rosaleda registraron mucha actividad durante toda la jornada. Y promete que el ajetreo continúe los próximos días tras iniciarse la nueva fase de la campaña de abonados y coincidiendo con la retirada de entradas para presenciar el trofeo Costa del Sol del próximo sábado en La Rosaleda ante la Sampdoria italiana.

El club está ya rozando los registros del curso pasado, lo que supone un avance y un incremento en la ilusión malaguista. Ayer se registraron 500 nuevos abonados, lo que hace llegar ya a la cifra de 19.500 aficionados que cuentan con su abono. El club está a un paso de superar la barrera de los 20.000 abonos y las previsiones en la zona noble de La Rosaleda se han elevado con el paso de las semanas. Pese a que el primer objetivo era superar los 20.000 abonados del curso pasado, ahora se piensa en cifras propias de otra época y que rondarían los 23.000 malaguistas.

Además, las largas colas de ayer coincidieron también con los abonados malaguistas que quieren retirar sus entradas para presenciar el duelo contra la Sampdoria italiana del próximo sábado en La Rosaleda, correspondiente al Trofeo Costa del Sol.

Ayer se registraron 4.000 localidades vendidas, lo que augura que habrá un buen ambiente en las gradas de Martiricos para el primer partido del curso en el coso malaguista. La afición se muestra contenta e ilusionada con la nueva puesta en escena del conjunto blanquiazul esta temporada y buena prueba de ello son los números en abonos y las entradas que ya se han retirado para el Costa del Sol.