­ Que el fútbol eche un frenazo en mitad de la competición no siempre sienta bien en Martiricos. Al Málaga, en los dos últimos años y medio, precisamente le viene hasta mal ya que tras los últimos once parones por compromisos internacionales o por vacaciones navideñas, el conjunto blanquiazul sólo ha sido capaz de ganar en dos ocasiones. Un mal que pone de manifiesto alguno de los problemas que ahora atraviesa el conjunto blanquiazul.

Y es que el parón, lejos de ser un punto a favor, puede ser negativo. El Málaga CF, en los últimos años, es un caladero para las selecciones. Por una razón o por otra, el conjunto blanquiazul sufre grandes ausencias de jugadores importantes durante estas fechas, ya que son citados con sus respectivas selecciones nacionales. Eso, como ya ha sucedido en esta ocasión, es un problema para el técnico de turno -antes Javi Gracia, ahora Juande Ramos-, ya que ve mermada la capacidad de su plantilla y las piezas con las que trabajar y corregir errores.

Además, las lesiones también parecen incrementarse, lejos de rebajar los plazos. Esta semana se han lesionado varios jugadores blanquiazules, lo que supone otro grave problema.

El frenazo en la competición es evidente ya que en algunos casos incluso se han truncado rachas positivas.

Sin triunfos en el 2016. De cualquier modo, el último triunfo malaguista tras un parón fue en diciembre, tras volver de las vacaciones de Navidad. El Málaga CF visitó el Ciudad de Valencia y venció 0-1. Fue el único triunfo tras parón en toda la temporada ya que el resto empató dos y perdió otros dos. Un año antes, el balance tampoco fue positivo ya que sólo ganó tras la vuelta del parón en octubre por los compromisos internacionales. Fue al Córdoba 1-2 en El Arcángel. Dos empates y dos derrotas, el cómputo global. Este curso, de momento, una derrota, contra el Villarreal (0-2). Veremos en Mendizorroza.