Juande Ramos, entrenador del Málaga, valoró este sábado, tras la derrota por 4-2 con el Atlético de Madrid, que su equipo "no se ha entregado en ningún momento" y dio la "cara" ante un rival "muy superior en estos momentos" a su conjunto, al tiempo que citó como claves los "errores defensivos".

"Ha sido un partido muy competido. El Atlético se ha puesto pronto por delante en el marcador y eso nos ha exigido mucho todo el encuentro. Con el marcador a favor es difícil jugar contra ellos. En la segunda parte hemos empujado todo lo que hemos podido, con el 3-2 estuvimos cerca, pero llegó el cuarto gol suyo", repasó.

"El Málaga no se ha entregado en ningún momento y en todos los instantes ha estado buscando conseguir un resultado positivo", añadió el técnico, que apuntó: "El Atlético es muy superior al Málaga en estos momentos, pero el Málaga no ha perdido la cara al partido. Algunos errores defensivos nos han condenado a la derrota".

"En la primera parte hemos estado flojos, hemos regalado muchas ocasiones de gol. Sobre todo, los goles eran situaciones que podíamos haber controlado. Luego en la segunda parte, con el 3-1 y después con el 3-2, hemos tenido 20 minutos que parecía que podía llegar el empate", continuó.

También habló de la expulsión de Chory Castro en el minuto 88: "La tenemos que ver en televisión, ver si ha ocurrido algo. Son jugadas muy rápidas, es difícil verlas y yo creo que, como había expulsado a un jugador del Atlético de Madrid, el árbitro en cuanto ha podido ha equilibrado el partido. Veremos en televisión si se puede recurrir o ha habido esa falta"

Juande no valoró individualmente a ningún jugador, cuando fue preguntado por la actuación de Bakary Koné, y recordó las siete bajas con las que afrontó el encuentro: "No teníamos más jugadores y con los que teníamos había que conformar el once. El equipo ha dado todo de sí lo que ha podido y no se le puede reprochar nada".

El técnico, que apuntó que con "tantas ausencias no es fácil ajustar piezas" con vistas al duelo del próximo viernes contra el Sporting, hoy jugó con tres centrales con una intención: "ellos tienen dos puntas muy rápidos, con Gameiro y Griezmann, y jugar uno contra uno contra ellos era un riesgo excesivamente grande".