«Meterle mano» al FC Barcelona es tarea casi imposible, y más en su Camp Nou. Una gesta que consiguió el Alavés hace poco más de dos meses y que guarda una similitud con el partido que disputará mañana el Málaga y al que se podrá agarrar para sacar algo positivo: el duelo ante los vascos llegó también tras un parón liguero por selecciones.

Ganar allí adquiere el calificativo de gesta, una misión que pocas veces llega a buen puerto pero que cuando viene después del parón FIFA aparece una rendija. Una grieta que consiguió traspasar el Alavés en la tercera jornada contra todo pronóstico (1-2) y en la que debe fijarse el Málaga para tratar de sacar algo positivo.

El conjunto vasco consiguió sorprender al un Barcelona más que despistado, plagado de suplentes por el parón por selecciones y que fue una caricatura de sí mismo. No fue el día del conjunto azulgrana ni de su técnico, que plagó el once con los menos habituales. Y es que el técnico asturiano alineó hasta siete suplentes por su política de rotaciones: Cillessen, Lucas Digne, Aleix Vidal, Jeremy Mathieu, Denis Suárez, Arda Turan y Paco Alcácer. Por su parte, de los teóricos titulares sólo comparecieron Mascherano, Ivan Rakitic, Sergio Busquets y Neymar.

Luis Enrique trató de enmendar su error inicial con la entrada de sus estrellas: Messi, Iniesta y Luis Suárez, que no consiguieron darle la vuelta a los goles de Deyverson e Ibai Gómez.

Luis Enrique aprendió. La «voltereta» que le dio el Alavés al Barça sirvió de acicate para Luis Enrique, que aprendió de sus errores y limitó sus rotaciones a la vuelta del segundo parón por fechas FIFA. Así, en el encuentro que le midió al Deportivo de la Coruña, el asturiano no quiso sorpresas y solo hizo cuatro rotaciones: Lucas Digne, Jeremy Mathieu, Arda Turan y Rafinha. En ese partido el Barça, con todas sus estrellas a excepción Messi -que entró en la segunda parte pese a estar mermado físicamente, salió enchufado tras aprender la lección con el Alavés y pasó por encima del cuadro gallego por 4-0, con tres goles al descanso.