La sala Oyarzábal de la antigua sede de la Diputación Provincial de Málaga, en la Plaza de la Marina, fue el escenario esta tarde de la charla 'Arnau, fútbol dentro y fuera de casa', moderada por el veterano periodista Paco Cañete y en la que participó, junto al director deportivo malaguista, María José Camacho, esposa del ejecutivo blanquiazul.

En la cita se hizo un amplio recorrido por la vida deportiva del exguardameta, salpicada de anécdotas tanto propias como de su mujer. Arnau, tras hablar de su etapa en el Barcelona, recordó lo difícil de sus inicios en el Málaga CF, siempre a la sombra de Koke Contreras.

El ahora ejecutivo desveló lo que el mismo calificó como un "secreto": "Los dos primeros años en Málaga le pedí al director deportivo irme porque no quería estar aquí sin jugar". A pesar de esa mala experiencia inicial, Arnau tiene claro que es peor estar en los despachos que en el campo. "Se pasa peor en el palco que en el campo".

Sobre la mala racha de resultados actual del equipo, Arnau se mostró optimista. "Ahora estamos en una situación que hay que cambiar la dinámica. Jugamos bien, pero no ganamos. Estamos trabajando bien, pero nos falta poner en valor lo que se está realizando".

El director deportivo prosiguió con su optimismo. "Estoy satisfecho con lo que hemos fichado y con el juego del equipo contra el Espanyol. Nos tiene que ir mejor en los resultados, pero estoy contento con el trabajo que estamos haciendo", aseguró.

Por último reconoció, una vez más, que la marcha de Juande Ramos como entrenador del club blanquiazul no ha sido una decepción para él. "La marcha de Juande fue una sorpresa. No me lo esperaba. Pero no estoy decepcionado porque él siempre va de cara", finalizó.