Es la hora de Martiricos, de la afición del Málaga y de hacer valer el factor cancha. Es el momento de La Rosaleda, de demostrar que es el jugador número 12 y que la respuesta unánime que se produce cada jornada de local en la grada tenga también un eco sobre el césped. El coso blanquiazul hace tiempo que no hace valer su presión y su entrega. Y no porque no se haya volcado la afición con el conjunto blanquiazul, sino porque los resultados no han llegado, para desesperación malaguista una y otra vez.

El Málaga sólo ha conseguido una victoria en las últimas seis ocasiones que ha jugado como local en Liga, una más si se cuenta con la derrota de Copa del Rey contra el Córdoba, por lo que el bagaje es bastante pobre. Es decir, que el conjunto blanquiazul sólo ha podido retener cuatro puntos de 18 disputados como local.

Y el calendario, en La Rosaleda, ha sido relativamente benévolo con rivales accesibles. Desde la victoria sobre el Deportivo de La Coruña el pasado 26 de noviembre, los males del conjunto blanquiazul se han multiplicado, y no sólo lejos de Martiricos, también en casa. El gol de Ontiveros en la prolongación contra los gallegos evitó un desastre mayor, pero desde entonces el Málaga ha dejado salir vivo en La Rosaleda a Granada (1-1), Real Sociedad (0-2), Espanyol (0-1), Real Betis (1-2) y Alavés (1-2). Sólo el triunfo sobre la UD Las Palmas (2-1) el pasado 20 de febrero, frena una sangría aún mayor.

En cualquier caso, el Málaga CF suma 20 puntos como local, ya que en el primer tramo de la temporada sí consiguió ganar partidos contra rivales que ahora se han convertidos en directos. Es el decimotercer equipo que más puntos ha cosechado en casa -por debajo de la media-, pero ha disputado sólo 13 encuentros de local, mientras que hay equipos que ya han jugado 15.

Un calendario complejo

Al Málaga le resta un calendario de complejidad máxima en casa. Por La Rosaleda aún tienen que desfilar Atlético de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Celta y Real Madrid. Se podría decir que la permanencia pasa por casa, pero lo cierto es que las miradas están puestas en los duelos lejos de Martiricos.

Serán seis partidos donde el factor Martiricos deberá tomar un papel protagonista y donde la diferencia que pueda existir sobre el césped tiene que quedar desnivelada en la grada. Para los próximos partidos la afición ya ha mostrado su entusiasmo y han gastado casi todo el papel.

El club confía en colgar el cartel de «No hay billetes» en ambos partidos que tienen un gran atractivo para los aficionados, pero que también llegan en un momento complejo para el conjunto blanquiazul.

Ayer, al cierre de esta edición, aún restaban 28 entradas disponibles para el duelo contra los azulgrana -Gol y Fondo estaban agotados-, mientras que para el duelo contra los rojiblancos de este sábado (20.45 horas), aún quedaban poco más de 300 localidades disponibles.

En ambos partidos habrá un gran ambiente en la grada de Martiricos, con colorido y expectación máxima. Es la hora de La Rosaleda, el momento de volver a ganar en casa y de comenzar a sumar de tres en tres.