El Málaga CF tiene atado a Roberto Jiménez para que sea jugador blanquiazul la próxima temporada. Sin embargo, en el RCD Espanyol juega al despiste y según apuntó ayer el director deportivo, Jordi Lardín, aún esperan una oferta en firme del club blanquiazul. El futuro del guardameta está en la Costa del Sol y las piezas deben comenzar a encajar cuando el club también suelte lastre de jugadores. Y a la espera de la marcha de Sandro o Kameni, el club sigue estrechando el cerco.

«Roberto, si quiere salir y hay una oferta, saldrá. Pero es jugador del Espanyol y hasta que no salga así será», dijo el directivo perico en la presentación de Diego López como portero blanquiazul.

La realidad es que la negociación está cercana a cristalizar tras acercar posturas en los últimos días. El Málaga pagará un traspaso que rondará los dos millones de euros y Míchel tendrá al portero deseado.

La llegada de Roberto provocará la salida de Carlos Kameni. El guardameta cuenta con el interés del Fenerbahce y en Turquía insisten en que las posturas están muy cercanas. De hecho, ayer se apuntaba a que el representante del jugador ya estaría en Estambul negociando las condiciones del acuerdo y que a Kameni se le espera para la próxima semana. El camerunés quiere un contrato de tres temporadas y una ficha anual de dos millones, mientras que de momento lo ofrecen 2+1 y 1,7 por año.

En el Málaga, mientras, esperan novedades ya que la negociación sería sencilla si el meta y el club turco se ponen de acuerdo. Kameni posiblemente saldría con la carta de libertad, aunque renunciando a importantes emolumentos, lo que aliviaría la carga salarial del Málaga CF.