El «6» del Málaga CF que deja Ignacio Camacho tras su marcha al Wolfsburgo está a buen recaudo. El canterano Pablo Fornals, uno de los puntales de la nueva hornada de jugadores y llamado a liderar el conjunto blanquiazul en los próximos años, hereda el dorsal que durante seis temporadas ha llevado con orgullo y gallardía el ya excapitán malaguista.

Y es que no hay mejor sucesor que Pablo Fornals para portar un número que durante tanto tiempo ha sido asociado a la figura de un futbolista tan importante en la historia reciente como es el maño, que con su salida ha dejado 15 millones de euros en las arcas malaguistas.

Fornals lució el «6» en los 45 minutos que disputó el pasado viernes contra el Sheffield United, de la Segunda inglesa, en el primer «bolo» veraniego de los de Míchel, Así, el canterano pasa a ser ya jugador profesional de la primera plantilla malaguista a todos los efectos, ya que la pasada temporada aún lucía dorsal del filial, concretamente el 31. Ahora, Pablo ya lucirá los galones que merece y que Míchel González le ha otorgado tanto en privado como en cada aparición pública, donde ha incidido en que Fornals es el futbolista que más se asemeja a él.

Y es que, tras la pequeña decepción que supuso para él no entrar entre los convocados de Celades para el Europeo sub'21 de Polonia, Fornals ha llegado a la pretemporada con ganas de asumir responsabilidades y jerarquía en la que será su tercera temporada con el primer equipo. Javi Gracia le dio la oportunidad de jugar en Primera, con Juande se reafirmó y Míchel le ha dado la libertad y confianza definitiva para soltarse. Sin ir más lejos, en los peores momentos del equipo la pasada temporada, Fornals demostró la personalidad necesaria para asumir responsabilidades. Se ofreció, tiró del carro y no le quemó el balón en los pies, y todo eso con tan solo 21 años.

Renovación

Por todo ello, la renovación del jugador se antoja fundamental en los esquemas del Málaga a día de hoy. Su cláusula ronda los 12 millones de euros, una cantidad asumible para muchos equipos de alto nivel en Europa que siguen de cerca al futbolista.

Francesc Arnau indicó semanas atrás que ha habían entablado las primeras conversaciones con los representantes del jugador, con la intención de mejorarle el contrato, situarlo acorde con su estatus dentro de la plantilla e incrementar la cláusula de rescisión para encarecer su precio en un hipotético futuro traspaso. Y es que el caché del jugador es importante. Asentado ya en Primera División, donde la pasada temporada marcó 6 goles y repartió 3 asistencias en 32 partidos.

Tiene contrato hasta 2019, pero la intención del Málaga es blindarle con un contrato largo para que se convierta en la bandera del nuevo Málaga.