Míchel González, entrenador del Málaga CF, no se ha mordido la lengua a la hora de explicar las razones por las que Javi Ontiveros ha sido apartado del equipo. Sin entrar en detalles, el madrileño ha justificado la decisión al considerar que el canterano ha tenido una "falta grave de indisciplina", además de asegurar que "no es la primera".

"El jugador está fuera del grupo por una situación que él ha creado, es una situación disciplinaria grave, que no es la primera. Han habido alguna cosas más que no me convencem ni a mí ni al grupo. Hay que mirar por el grupo, quién quiera estar que esté. Cuando se toman decisiones de este tipo es porque la situación es grave".

"A nivel personal no me ha gustado otras cosas, un like a una foto que pone que nos han metido 5 goles... Sé que hay gente que confía en él, yo fui el primero que lo puse de titular", ha continuado el entrenador sobre la polémica.

Por otro lado, Míchel no considera que el partido contra el Athletic sea una final. "No soy tan dramático, pero sí es cierto que la situación es delicada y tensa para nosotros. No es normal lo que nos está pasando. Es un partido importante, pero no una final. Estamos pensando en reaccionar y en la victoria".

En ese sentido, tampoco se para a pensar sí una derrota ante el Athletic le puede costar su puesto. "Yo siempre soy positivo, no me planteo jugar a nada para no ganar, creo fielmente que mañana vamos a ganar y vamos a hacer un buen partido... la única consecuencia en la que pienso es la alegría que va a tener la afición tras la victoria. Si pierdo energia en pensar lo que va a suceder después del partido estaría distraído de lo que realmente importa".

Sobre el estado mental de la plantilla tras tantas derrotas, Míchel ha explicado que es partidario de trabajar ese aspecto con profesional, aunque también piensa que los jugadores saben lo que tienen que cambiar para recobrar la moral. "Creo en ello, he trabajado siempre con ello, lo considero importante, fundamental. Hay una parte tambien fundamental en cada uno, hemos cruzado el límite, es el momento de pensar lo que necesitamos aunqe nunca me he quejado de la actitud de los jugadores".

"La moral del equipo está resentida, yo como profesional nunca he sufrido cinco derrotas seguidas. Nuestra profesión es así, hay que seguir trabajando. Muchas veces me pregunto, ¿cuál es mi equipo, el de la primera o el de la segunda parte de Mestalla?, pero no puedo escaquearme, son los dos. La moral cambia rápido cuando llega la primera victoria", ha continuado.

También se ha referido a los continuos errores defensivos del equipo, aunque ha explicado que esta semana con tres partidos es difícil trabajar aspectos tácticos. "En esta semana es difícil trabajar con tantos partidos, la actitud la trabajamos y corregimos errores pero tomamos decisiones en las que nos equivocamos. Los jugadores saben perfectamente dónde encontrar la solución a algunas cosas que nos pasan. Si no somos fuertes defensivamente estamos condenados".

Míchel no ha dado pistas sobre el once que dispondrá mañana ante el Athletic, pero ve como una opción más jugar con Borja Bastón y Rolan al mismo tiempo. "Pensamos en hacer todas la variables, no somos inmovilistas, miramos todo. No voy a dejar de seguir intentándolo y buscando dentro de la plantilla".

Por otro lado, el técnico no contempla el empate como solución a los males del equipo. "No me conformo con el empate, tenemos que ser ambiciosos, es cierto que si hubiésemos jugado más defensivos algunos partidos ahora tendríamos tres puntos, pero no pienso en ello como solución para los males del equipo".

Por último, Míchel ha adelantado que Peñaranda irá incorporándose la semana que viene de manera progresiva a los entrenamientos con el grupo y ha vuelto a elogiar a la afición, que mañana se movilizará para recibir al equipo antes del partido.