Miguel González del Campo "Míchel" fue muy duro en sala de prensa para analizar el Barça-Málaga y la actuación arbitral, sobre la que se lamentó del ilegal 1-0 y enumeró los errores que han dinamitado al equipo durante esta horrible temporada.

"Siempre vamos por detrás. Arbitrar es muy difícil, ¿pero tanto? Un gol del Eibar en fuera de juego, en Valencia un segundo gol que cerró el partido. El domingo pasado otra vez. Y es ir por detrás en el marcador, que para nosotros es una losa, que somos últimos. Esta racha de situaciones... No vamos a achacar nuestra situación a la labor arbitral. No pedimos que nos den, pero nos están quitando mucho, muchísimo. Es muy difícil arbitral, pero también ser el entrenador del colista y tragártela, una tras otra", explicó Míchel.

Cuestionado de nuevo sobre el 1-0, en el que Deulofeu remató un balón que había salido antes a centro de Digne, Míchel explicó: "Es muy duro venir al Nou Camp y en el minuto 2, siendo el último, ese gol. Te atemoriza. Quiero, ante ante los rumores que nos rodean y las malas noticias, felicitar a los jugadores. No hemos bajado los brazos ni cuando recibimos un revés en el minuto 2. Si analizamos las nueve jornadas, algunos goles no son por mi planteamiento o por mis defensas...", relató.

"Tenemos un punto, y es una sensación mala y real. Nos aferramos a seguir compitiendo y jugando a este nivel, con más acierto... Quiero que mis jugadores estén tranquilos para salir de esta situación", detalló Míchel, que explicó que no acudió al Camp Nou como víctima. "Nunca voy a pensar jugar un partido pensando en que no vamos a poder ganar. Teníamos que ser organizados, trabajar y hemos estado dentro del partido, a pesar de lo del minuto 2. El rival es excelente, con jugadores que te aburren de tener el balón y mi equipo ha estado ahí. Quizá, en otras circunstancias, quién sabe si nos hubiésemos adelantado o hubiésemos tenido opciones".

Cuestionado sobre el partido y el buen nivel mostrado en muchos momentos, Míchel explicó que se asemejó a otros buenos encuentros que ha tenido el equipo. "En el Wanda jugamos bien, contra el Athletic la rebelión fue buena. Pero es cierto que no arrancamos, pero los jugadores no bajan los brazos, siguen, no se desaniman. El equipo tiene esperanzas".

Míchel se felicitó de la actuación de dos de las novedades del once, Adrián y Chory. "Adrián ha dado su verdadera medida como futbolista y Chory es un veterano de guerra, lo quería para jugar entre líneas, y Peñaranda se ha incorporado en una excelente situación. Hemos encontrado cosas que nos ayudan a mantener la esperanza. Estoy controvertido, porque veo que mis jugadores hacen muchas cosas pero no le salen bien".

Respecto a la lesión del uruguayo Diego Rolan, que se fue antes del descanso por lesión, Míchel comentó que no sabía aún nada. "Se le ha puesto tensa la zona. Ha notado un calambre. Tenemos 26 jugadores, pero la enfermería está llena. Cuando estás en esta situación te pasan estas cosas. Rolan nos está dando bastante, profundidad, alternativas, se adapta a todas las situaciones. Ha sabido tirar de los centrales y crear espacios", finalizó.