Míchel ha hablado en la previa del duelo contra el Numancia en Copa del Rey, pero aún colea la derrota en el Camp Nou y las sensaciones ligueras, donde el conjunto blanquiazul es colista.

El técnico blanquiazul asegura que las sensaciones, pese a caer nuevamente, son relativamente positivas. "Hay una parte buena. Veo a mi equipo seguir compitiendo y organizado, desarrollando lo que trabajamos día a día. Me da la sensación de que el equipo es capaz de jugar bien contra el Barça, en todos los sentidos, defensiva y ofensivamente, y por ahí tenemos que seguir".

El técnico fue cuestionado sobre los errores arbitrales. "Hay cosas que no se pueden entrenar. Se quedaron parados también hasta ellos. No es una cosa de tecnología, que también que estaría bien que nos ayudara. Lo del otro día no era una cuestión de tecnología, no hace falta para verlo. Pero no me quedo con eso, no estamos los últimos por los árbitros, pero también".

E insistió sobre cómo están afectando los arbitrajes. "Sólo hace falta revisar los últimos cuatro partidos. Nos hemos puesto por detrás en situaciones muy claras. Seguiríamos siendo posiblemente los colisas de la clasificación, ser árbitro seguro que es más difícil que entrenador, pero el otro día no es problema del VAR, es de aplicar las reglas. Es muy difícil equivocarse siempre en la misma dirección, pero los partidos se nos ponen en contra siempre. No me gusta criticar eso, pero el silencio acomoda a todo el mundo. La tecnológica nos va a ayudar mucho. No esta mal que se mejore en todo".

Pero ahora toca la Copa del Rey. Y el torneo del ko hay que afrontarlo con energía. "Es una competición más y a mí me encanta la Copa. Si miráis mi trayectoria como entrenador, la Copa siempre me ha parecido buenísima. Respeto muchísimo la Copa y es una ocasión muy buena para que el equipo se meta en dinámica positiva. Y no lo digo porque vayamos a jugar contra un equipo que, sobre el papel, es de Segunda División, porque no es cierto. Hay muchos motivos para creer que la Copa es buena para nosotros y para este club. Entiendo que ante un rival como el Numancia no debemos despistarnos. Un buen resultado nos serviría en el aspecto anímico más que tener un buen resultado".

Míchel analizó al rival, que aunque milita en Segunda, llega en un buen momento. "El Numancia, excepto en el partido ante el Tenerife, siempre juega con la misma idea en cuanto a sistema. Tiene variedad y además es un entrenador al que le gusta cambiar a los jugadores para mantenerlos en vilo y para mantenerlos en esa competición que es muy larga y contundente".

Y el técnico continuó analizando al Numancia. "Creo que es un equipo con velocidad arriba, con calidad en algunos de sus jugadores. Bandas muy rápidas y decididas a sacar siempre centro con los laterales. Es un equipo como el Eibar, salvando las diferencias. Juega directo, con segundas jugadas y tiene calidad en los centros y en la definición de jugadas. No es un equipo que te hace los partidos cómodos. Mucho más allá de allá de estar en Segunda, podría estar en Primer y competir perfectamente".