El Málaga CF afronta hoy uno de esos partidos que cuando sale el calendario ya sabes de antemano que lo normal es un '1' en la quiniela. Un partido contra el Real Madrid, y más en Chamartín, suele ser sinónimo de derrota, de goleada en contra o de ayudas arbitrales en favor del gigante blanco. Pero de tanto en cuanto sale ese partido en el que David pone contra las cuerdas a Goliat, se alinean los planetas y el Bernabéu enmudece para asistir atónito al asalto de un rival de provincias del majestuoso castillo del reino. Sino que se lo digan al Betis hace pocos meses...

Con esa misma intención se presenta hoy el Málaga CF en el Santiago Bernabéu a partir de las 16:15 horas (BeIN LaLiga). Sin complejos pero concienciados de la difícil situación que atraviesa el equipo en la clasificación, el conjunto blanquiazul buscará, cuanto menos, sumar un punto en la capital para que el terreno ganado con los triunfos en casa ante Celta y Dépor no se quede en anécdota.

Lo cierto es que las facultades del Málaga CF fuera de casa en esta temporada invitan poco al optimismo. Los de Míchel no han sumado aún lejos de La Rosaleda y tampoco saben lo que es celebrar un gol como visitante. Números muy pobres que quiere revertir ante un equipo que de antemano ya se intuye que te va a hacer gol por el potencial de sus delanteros, aunque ahora en entredicho.

Además, el Málaga no ha ganado nunca en su historia en el Bernabéu, un campo maldito para el cuadro blanquiazul. En todo caso, el equipo malaguista sí ha conseguido allí sonoros empates, como el de hace dos temporadas con Javi Gracia en el banquillo y un hombre menos buena parte de la segunda mitad (0-0), el de la temporada 2011-12 y bautizado como el «Cazorlazo» tras empatar con un magistral lanzamiento de falta del asturiano en el descuento (1-1) o en la 2001/02, con Peiró en el banquillo y un tanto de Fernando Sanz con el trasero para igualar el conseguido por Roberto Carlos (1-1).

Pero el partido de hoy será otra historia. Míchel recupera para el duelo a Recio, que apunta a titular en la medular por Rolón tras cumplir partido de sanción. Pocas pistas dio el madrileño antes de visitar a su equipo del alma, aunque deslizó que jugar con un sistema de cinco defensas sería arriesgado ante la falta de efectivos atrás en el caso de imprevisto durante el partido.

En todo caso, será tarea complicada pillar despistado a un Real Madrid que le va la vida en el partido de esta tarde. A 10 puntos del FC Barcelona, los blancos no se pueden permitir más traspiés y tras la moral adquirida con la goleada al Apoel en Champions, buscarán un triunfo ante el Málaga con el que recortar distancias.

Aunque la enfermería madridista se va vaciando, Zidane no da pistas sobre lo que tiene en mente. En principio puede contar ya con Kovacic y debe decidir si es el momento para el regreso de Keylor Navas y Gareth Bale, recuperados todos de sus lesiones. No parece tener intenciones de forzar a ninguno ante el Málaga.

Pierde a Marco Asensio por un problema muscular y por sanción no podrá contar con Nacho, lo que no forzará la decisión con Sergio Ramos. El sevillano se fracturó la nariz en el Wanda Metropolitano y podría jugar con una máscara de protección si lo estiman oportuno.

Por su parte, el malagueño Isco y el brasileño Casemiro llegan a la cita descansados tras no participar en la goleada ante el Apoel en Nicosia.