La planificación deportiva del Málaga CF del próximo curso no se ha visto alterada en los últimos días, ni para bien ni para mal, pero el club continúa estrechando el cerco sobre su próximo entrenador, que es la mayor preocupación a estas alturas. Uno que es seguro que no vendrá es Juan Ramón López Muñiz, que descartó el ofrecimiento malaguista por diversas cuestiones y que ya negocia con la UD Las Palmas para ser su nuevo entrenador. El conjunto canario, a diez puntos del Levante, también ve compleja la permanencia en Primera División y ya se ha puesto manos a la obra para planificar el curso en Segunda.

Es decir, que al Málaga CF ya le ha salido un competidor en la categoría de plata, un rival con el que luchar en el mercado y con el que tendrá que lidiar a partir de ahora, si es que no lo venía haciendo desde antes. Y no sólo en cuestiones del entrenador, sino que también en materia de fichajes. La UD Las Palmas será un duro competidor por hacerse con jugadores para intentar volver también a Primera.

En cualquier caso, el primer paso del Málaga CF sigue siendo el de encontrar un entrenador para el proyecto malaguista en Segunda. Un técnico válido y con ambición para intentar ascender en un solo año. Y que sepa también aguantar la presión.

Por ahora, los nombres que han sonado con más fuerza son el de José Luis Oltra, Joseba Arrasate y Fran Escribá. El entrenador valenciano parece haber tomado la ventaja, pero el club aún tenía que decidir si era finalmente el elegido o no.

En ese sentido, el club podría demorar el anuncio del nuevo entrenador hasta que acabe la temporada -en caso de que estuviera libre- o incluso hasta que finalice el nuevo técnico su trabajo en su actual, si se encuentra trabajando actualmente.

Es poco probable que el Málaga anuncie el nombre del nuevo entrenador justo después de consumarse el descenso, por lo que la demora será mayor. Mientras, la dirección deportiva trabaja en la confección de la plantilla a expensas de atar a un nuevo entrenador, que se espera que no se demore.