La asociación de promotores del turismo residencial, deportivo y de salud de Andalucía, Promotur, está dispuesta a acudir a los tribunales para oponerse a la ponencia de valores planteada por la Dirección General del Catastro para Marbella. La medida ya está impugnada ante la Gerencia Territorial de Málaga. Su presidente, Ramón Dávila,prevé un incremento «muy importante» de los impuestos que se calculan a partir de los valores fijados, como es el caso del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), y considera que puede traducirse en una «ruina» para el sector turístico.
«El coste de vivir en Marbella se incrementa frente al coste de vivir en lugares alternativos y eso nos resta competitividad», dijo. Asimismo, para los promotores que cuentan con parcelas que tardar alrededor de cinco años en tramitar su urbanización, significa «su ruina», añadió tras recordar que se empieza a pagar por un suelo nada más pasa a ser urbanizable.
23 años sin revisión
Hace 23 años que este organismo, dependiente del Ministerio de Hacienda, no revisaba los valores catastrales de Marbella. La diferencia entre el valor catastral y el de mercado de un inmueble ha quedado desfasado. Según la ponencia de valores aprobada el año pasado por el anterior gobierno socialista de la nación, el valor catastral medio de los inmuebles de Marbella es un 20% de su valor de mercado.
Dávila no está de acuerdo con los criterios empleados y así lo manifiesta en la alegación de Promotur, a la que ha tenido acceso este diario. De entrada porque considera que la ponencia «está viciada en su conjunto» al tomar como base definiciones urbanísticas de la normativa reguladora del suelo de 1998 que «ya han sido derogadas», argumenta. Existe un texto refundido de la Ley de Suelo de 2008.
«Los criterios empleados siempre llevan a incrementar el valor catastral. Se incrementan cuando suben los valores de mercado y cuando bajan los valores de mercado», indicó.
En plena crisis económica, Dávila recordó que el valor real de los inmuebles en el mercado ha variado mucho. «Los informes que han sido hecho públicos por empresas tasadoras señalan una reducción dramática de los precios y valores de mercado de las viviendas de España, de la Costa del Sol y Marbella, sobre la existencia de un tremendo stock de viviendas sin vender. Sobre el stock del que disponen las entidades financieras se aplican reducciones de hasta el 50% o incluso más de los precios publicados», establece la alegación de Promotur.
Marbella, en su caso, cuenta con un planeamiento vigente desde hace apenas año y medio, que ha variado las calificaciones de muchos de sus suelos.
El presidente de Promotur cree injusto que los inmuebles tengan un valor determinado cuando se tienen que expropiar, «y por ejemplo valgan uno» y otro cuando se tiene que pagar impuestos, «y valgan dos», ejemplificó. «No parece que forme parte de los principios de justicia tributaria. Hay que unificar los impuestos de valoración», defendió.
Subida de impuestos
A la revisión de los valores catastrales de Marbella, al alza, hay que sumar la subida de los tipos impositivos por parte del gobierno municipal del PP de la localidad.
La alcaldesa, Ángeles Muñoz, presentó una nueva ordenanza reguladora de este impuesto en septiembre. Recalcó una reducción del coste del IBI en función del valor catastral de la vivienda. Como máximo, un 10% para las inferiores a 100.000 euros. El tipo de gravamen sobre el valor catastral se mantendrá en un 1%, aseveró.
El Consistorio modificó también el impuesto conocido como Plusvalía. «Queremos impulsar la compraventa, para ello se rebajarán en un 60% a todo el que realice operaciones» dijo Muñoz.
La oposición considera que, en lugar de plantear bonificaciones, Muñoz podría haber copiado de su compañero de partido Francisco de la Torre, alcalde de Málaga, que al menos se planteó solicitar una revisión de valores catastrales a la baja para contrarrestar la subida.
