La corporación municipal de Marbella aprobó ayer una nueva ordenanza para regular la concesión de permisos de obra comunicados. Un tipo de licencia destinada para las reformas menores y que tarda dos semanas en concederse, según explicó ayer el concejal de Urbanismo, Pablo Moro.

«El tratamiento de todas las licencias de obra era igual hasta ahora. Tardaban dos años en concederse fueran de obra mayor o menor», según aclaró. Este tipo de permiso, implantado hace más de un año por el gobierno municipal del PP pero convertido ayer en ordenanza, está dirigido a todas aquellas obras cuyo coste es inferior a 60.000 euros.

«El año pasado el Consistorio otorgó 3.000 permisos de estas características», indicó el edil para hacer una idea de la importancia de la nueva ordenanza.

Los concejales socialistas votaron en contra del nuevo reglamento al encontrar algunos inconvenientes.

«Hay que revisar en comisión de Hacienda las tasas que se van a cobrar», indicó la concejala del PSOE Isabel Pérez, quien criticó que se cobre por conceptos como «pintar una casa o desatascar un simple desagüe», dijo.

Dos exediles del GIL, fuera del Consistorio. El portavoz del PP, Félix Romero, aclaró ayer ante una pregunta de Izquierda Unida en pleno, que los exediles del Grupo Independiente Liberal Carlos Marín y Emilio Jorrín están fuera de la plantilla del Consistorio. «Fueron mal despedidos por la comisión gestora y hubo que readmitirlos pero este equipo de gobierno solventó la situación y hoy día no cobran nada de este Ayuntamiento», añadió.