Las dos nuevas piscinas de Marbella, aún por rematar, acumulan una importante bolsa de demandantes. El Ayuntamiento calcula que cada instalación acuática, integrada en un complejo deportivo propio, acumulará alrededor de 5.000 socios, según indicó a este diario el concejal de Obras, Javier García.

Uno de los complejos se ubica en el núcleo poblacional de San Pedro Alcántara. Este complejo «ya está terminado», indicó el edil. «Estamos pendientes de que se adjudique su gestión», añadió. La tramitación administrativa para resolver este proceso se prolongará durante dos o tres meses.

La otra piscina se sitúa en la barriada de Miraflores, cerca del centro de Marbella. Este proyecto va más retrasado que el de San Pedro. Aún así, el edificio ya está cubierto por lo que podrá estar terminado en unos tres o cuatro meses, en opinión del edil.

Proyectos. Para los sampedreños es su primera piscina municipal de carácter deportivo. La nueva infraestructura se sitúa en el polideportivo de Fuente Nueva, justo encima de la actual piscina existente, a la que únicamente se le dio un uso terapéutico.

La empresa Sando ejecuta las obras de esta instalación, financiada a partes iguales entre el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía. En total, la inversión ha rondado los 4 millones, aunque la obra estaba presupuestada en 2,8.

Los trabajos comenzaron en febrero de 2010 y se han prolongado por encima de lo previsto ya que el plazo de ejecución no superaba los diez meses.

La piscina de Miraflores la acomete la adjudicataria Jarquil Andalucía desde septiembre de 2010 en un solar de unos 730 metros cuadrados, frente a los juzgados de la avenida Mayorazgo.

La construcción se presupuestó en 2,5 millones de euros y también está cofinanciada entre las administraciones local y autonómica. Aunque los planes iniciales fueron modificados a principios de 2011, lo que incluso conllevó la paralización temporal de la ejecución de las obras.

El complejo deportivo de Miraflores incluirá además de dos piscinas -una destinada al uso deportivo y otra para aprendizaje y terapias- otros servicios, como gimnasio y cafetería.

Hasta ahora, la única piscina pública de la que podían disfrutar los residentes de Marbella es la ubicada en el polideportivo Antonio Serrano Lima. Los propios gobernantes locales reconocieron que se trataba de una oferta pública insuficiente para una localidad que cuenta con cerca de 140.000 habitantes censados.

El mismo problema, el de la escasez, se repite en otras instalaciones deportivas municipales. De ahí que el Ayuntamiento de Marbella elaborara un plan para invertir 15 millones de euros en la creación y renovación de los espacios deportivos de la localidad en los últimos cuatro años.

La sustitución del césped artificial de los campos de fútbol, que se llevó a cabo en 10 de los 12 campos existentes, ha sido una de las actuaciones fundamentales.

Asimismo, los gobernantes municipales del Partido Popular destacan el nuevo polideportivo de Trapiche Norte, el primer carril bici de San Pedro Alcántara, las pistas de pádel de Paco Cantos o el nuevo edificio del Polideportivo de la Campana, en San Pedro. Además de los nuevos espacios creados en el Vigil de Quiñones, como áreas para vestuarios y conserjerías.

La remodelación del polideportivo Paco Cantos o del Palacio de Deportes de San Pedro Alcántara son alguno de los trabajos que también se han ejecutado y se incluyen en este presupuesto, junto a la rehabilitación del pabellón del Arquillo o del parqué del centro Antonio Serrano Lima.

Los socialistas consideran que el trabajo no es suficiente y que el Ayuntamiento debe preocuparse por las

necesidades que presentan los clubes deportivos de la localidad, que consideran abandonados, y ampliar la oferta pública de espacios deportivos.

Marbella cuenta en la actualidad con multitud de zonas para practicar deporte, pero privadas. Es el caso de sus 16 campos de golf, nueve clubes de tenis o dos centros ecuestres, entre otros.