«La plantilla, formada por 3.200 empleados consume cerca del 82% de los fondos municipales no financieros. Para lograr la estabilidad de las arcas municipales, el gasto tiene que reducirse hasta el 60%.

Estas declaraciones del coordinador de Hacienda del Ayuntamiento de Marbella, Carlos Rubio, a la Cadena Ser, desataron ayer la polémica y provocaron la primera de una larga serie de protestas que se avecinan entre los empleados municipales ante el plan de ajuste que debe implantar el Consistorio marbellí para equilibrar el desfase de 19 millones de euros detectados por el interventor. Un plan de ajuste que debe adoptarse como condición sine qua non para aprobar los presupuestos de Marbella de 2013.

El viceportavoz del grupo municipal socialista, Ricardo López, pidió explicaciones a Carlos Rubio por la necesidad de reducir la partida de personal del 82% al 60% ya que, según el PSOE, supondría despedir a 858 trabajadores.

El viceportavoz municipal del PSOE afirmó que la decisión de despedir a trabajadores surge de la gestión de Ángeles Muñoz en 2011, provocando un desfase de 19 millones de euros y obligando al Consistorio a reducir el déficit en 2012, ya que por ley se ve obligado a aplicar un plan de ajuste para equilibrar las cuentas.

López acusó al equipo de gobierno de centrar toda la reducción de costes en el personal municipal. El PSOE exige al equipo de gobierno de Marbella que presente los presupuestos de 2013 para conocer dónde tienen pensado reducir gastos, ya que dejar sin presupuesto al Ayuntamiento varios meses es un acto de irresponsabilidad, puesto que esto «paraliza la actividad de la administración local», dijo López.

«Antes que tocar ningún puesto de trabajo deben rescindirse los contratos a empresas privadas de prestación de servicios, ya que los trabajadores del Ayuntamiento de Marbella han visto cómo sus salarios han bajado más del 20% en términos reales desde el 2009», afirmó Ricardo López.

«Ángeles Muñoz y Carlos Rubio siguen contratando personal, y pagando complementos de productividad por encima de los 1.000 euros además del salario, a determinados trabajadores afines al PP», insistió el socialista, quien añadió que la eliminación de estos complementos supondría un ahorro de más de medio millón de euros, junto a la eliminación de contratos de alta dirección y la reducción del salario de los órganos de dirección, que supondría un ahorro de 2,5 millones de euros.

El concejal de IU en Marbella Enrique Monterroso afirmó por su parte que no tolerarán «ninguna expulsión ni ninguna reducción de los salarios básicos de los empleados». «Hay flecos en los presupuestos en los que poder recortar, alternativas que no conllevan poner en riesgo la estabilidad laboral de los empleados ni reducir los salarios básicos», dijo Monterroso.

El portavoz del equipo de gobierno, Félix Romero, manifestó que PSOE e IU han perdido una oportunidad de oro para que el plan de ajuste no afecte al personal al no apoyar en el Parlamento la petición de renegociar la devolución de los 100 millones que recibió la gestora de Marbella en 2006.