­El secretario de Política Institucional del PSOE-A, Francisco Conejo, pidió ayer a la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz (PP), que retire del cargo al concejal de Urbanismo, Pablo Moro, imputado por un presunto delito de prevaricación al no paralizar unas obras ilegales en un club de playa en las dunas de El Pinillo.

Conejo recordó que Pablo Moro ya ha prestado declaración como imputado por un presunto delito de prevaricación y que podría enfrentarse a otros dos supuestos delitos de cohecho y contra la ordenación del territorio.

El dirigente socialista entiende que el edil «no debe seguir ni un minuto más» al frente de la delegación de Urbanismo «mientras haya la sombra de la duda de tres supuestos delitos».

El pasado viernes, el grupo municipal de Izquierda Unida ya solicitó en el pleno celebrado en el Consistorio la destitución del concejal de Urbanismo después de que el juez le tomara declaración un día antes durante más de dos horas y confirmase su imputación por presuntos delitos en su gestión en las obras de dicho chiringuito.

Según IU, el juez que instruye la causa no sólo confirmó la imputación sino que también rechazó un recurso presentado por el concejal imputado -mediante un auto fechado a 24 de octubre- en el que rechazaba que la instrucción respondiera a ningún elemento político al «comprobarse irregularidades suficientes en el expediente de disciplina urbanística 156/14 para mantener la imputación judicial».

En su auto el juez considera «indiciariamente elementos constitutivos de delitos de prevaricación, cohecho y contra la ordenación del territorio».

Por su parte, el equipo de gobierno de Marbella mantiene que «no hay nada que sustente una denuncia sobre la ejecución de la obra de un club de playa, ya que el Ayuntamiento cursó dos paralizaciones de obra durante todo el proceso y se abrieron dos expedientes disciplinarios, uno instando a la reposición de la realidad física alterada y un segundo sancionador».