Algo más de 50 kilómetros. Es la distancia que el fugitivo aguantó con su Citroën Saxo antes de ser detenido por la Policía Nacional en Marbella a la altura de Puerto Banús. La carrera comenzó media hora antes, sobre las 10.30 horas, cuando el conductor fue sorprendido por una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico cometiendo una supuesta infracción en un punto de la Ronda Oeste entre Málaga y Torremolinos. El alto que le dieron los agentes le lanzó en una huida hacia adelante que fue sumando participantes policiales a medida que la persecución pasaba uno a uno los municipios de la Costa del Sol occidental. Guardias civiles, policías nacionales y policías locales y hasta el helicóptero de la Dirección General de Tráfico formaron una caravana que consiguió hacerle un embudo en Marbella. Arrinconado, embistió a un motorista de la Policía Nacional que no resultó herido e intentó huir infructuosamente a pie. Además de la moto, el conductor dejó en el camino un balance de al menos cuatro vehículos dañados, dos de la Guardia Civil y dos particulares, y un presunto delito contra la seguridad del tráfico por el que fue detenido. Según fuentes cercanas al caso, el hombre, de unos 35 años, tenía el carné retirado y circulaba sin seguro.