El propietario del grupo de restauración La Pesquera, Ramón Mesas, ha animado a los clientes de su cadena de restaurantes a seguir visitándolos justo al quedar en libertad tras ser detenido ayer en una operación contra el blanqueo de capitales.

Mesas ha quedado en libertad a las 15.00 horas tras declarar ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Marbella durante varias horas.

En declaraciones a Efe sus primeras palabras han sido para aclarar que sus restaurantes siguen abiertos: "La Pesquera sigue funcionando y que vengan todos los clientes".

El empresario no ha querido aclarar qué delitos se le imputan, ni la cantidad que ha pagado en concepto de fianza, aunque sí ha asegurado que no se ha embargado ninguna cuenta de sus empresas.

"Todo bien, no pasa nada, todo continúa bien, no hay ningún problema" ha reiterado a su salida, y ha añadido que está esperando "a ver qué es lo que pasa; el juez me ha dicho que no hay ningún problema y que se continúe todo".

Respecto a su detención, ha explicado que estaba de viaje en Marruecos, "vine corriendo para acá nada más que me enteré, para aclarar los casos", ha comentado.

La Agencia Tributaria y Guardia Civil mantienen abierta esta operación contra el blanqueo procedente de delitos contra la Hacienda pública y por la que se han intervenido 220 cuentas bancarias relacionadas con el grupo empresarial, unos 250.000 euros de una caja de seguridad, documentación y soportes informáticos.

Otros cuatro arrestados en la operación quedaron ayer en libertad con cargos y hay otras siete personas investigadas, mientras los agentes estudian el material incautado y examinan las cuentas bancarias vinculadas a un supuesto entramado societario de unas 40 firmas, algunas de ellas radicadas en Gibraltar.

La Guardia Civil registró el miércoles en Marbella el domicilio particular de Ramón Mesas, una finca rústica, un restaurante y las oficinas centrales del grupo hostelero La Pesquera.