Los tiempos políticos en Marbella siempre bajarán con las aguas revueltas. El Partido Popular anunció ayer de voz del edil de su grupo en el Ayuntamiento, Félix Romero, que un juzgado de ha aceptado un contencioso administrativo interpuesto por los populares contra el gobierno municipal «por impedir a la oposición el acceso a información municipal».

Romero aseguró que «sólo han bastado diez meses para que tenga que venir un juzgado a sacarle los colores al equipo de gobierno» ya que, según él, los 90 requerimientos de información que han presentado «se han quedado sin respuesta».

El alcalde de Marbella, José Bernal, salió ayer al paso de las acusaciones de los populares. Aseguró que un juzgado «ha preguntado al Ayuntamiento si se ha contestado o no, tal y como ha denunciado el Partido Popular, y los habilitados nacionales de la Asesoría Jurídica -y no los cargos de confianza como ocurría anteriormente con el PP en esta área- han trasladado al órgano judicial todas las respuestas que ya se le habían facilitado al Partido Popular, tanto por escrito como en los plenos». Bernal pidió a los populares que expongan también los requerimientos que han sido respondidos por el equipo de gobierno en la legislatura.