El Ayuntamiento de Marbella ha recibido una notificación de la Subdelegación del Gobierno para que explique si está aplicando la jornada laboral de 35 horas semanales a los funcionarios de la plantilla municipal y, en tal caso, le envíe el convenio colectivo en el que se acordó dicha medida.
En una misiva dirigida al alcalde de Marbella, José Bernal, la Subdelegación del Gobierno aporta unas declaraciones del concejal de Izquierda Unida Miguel Díaz y del propio regidor pronunciadas en el transcurso del debate sobre el estado del municipio, celebrado el pasado 29 de julio, en las que afirmaban que en su primer año de gobierno, el tripartito (PSOE, IU y OSP) había reimplantado condiciones eliminadas por el Partido Popular, como la jornada de 35 horas.
La Subdelegación del Gobierno recuerda al equipo de gobierno de Marbella que la Ley 2/2012 de 29 de junio de Presupuestos Generales del Estado establece que la jornada laboral del personal del sector público no podrá ser inferior a 37,5 horas semanales, por lo que advierte al tripartito de que podría estar infringiendo el ordenamiento jurídico.
Fuentes del equipo de gobierno de Marbella acusan al Partido Popular de intentar torpedear la paz social alcanzada por el tripartito, que en su primer año al frente del Consistorio, por ejemplo, ha cumplido la promesa de integrar a los trabajadores de los organismos autónomos locales, promesa que venía haciendo el PP desde hace años.
El equipo de gobierno acusa al PP de enviar a la Subdelegación las actas del pleno sobre el debate del municipio, en las que se ponían sobre la mesa los logros alcanzados en su primer año en la alcaldía, para azuzar a la Abogacía del Estado en su contra y romper el clima de entendimiento con los sindicatos.
No obstante, fuentes del tripartito afirman que van a mantener la flexibilización horaria para los funcionarios del Consistorio porque así lo acordaron con los sindicatos ante el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla).
Fuentes municipales recuerdan que cuando el tripartito llegó al gobierno de Marbella había una alta conflictividad laboral. La Ley de Estabilidad Presupuestaria de 2012 restituía la jornada de 37,5 horas en vez de la de 35 para los funcionarios, y la ley de recortes de 2014 eliminaba ciertas compensaciones en caso de baja por enfermedad.
No obstante, los sindicatos entendían que esas medidas vencían en 2015 y desde entonces exigen la restitución del convenio colectivo anterior a los recortes.
El tripartito negoció entonces inaplicar la cláusula del seguro médico privado que Gil otorgó a los trabajadores en su día (que supondría al Consistorio 4 millones de euros al año), a cambio de flexibilizar la jornada laboral, algo que acordaron el equipo de gobierno y los sindicatos ante el Sercla.
Sin embargo, la Subdelegación advierte de que no puede ser así. «Primero nos anularon el nombramiento de los directores generales y ahora nos quieren torpedear este acuerdo, pero nosotros tenemos un compromiso con los sindicatos, con el visto bueno del Sercla, y lo vamos a mantener», afirmaron ayer fuentes municipales.
