­Un total de 21 de los 54 hoteles con los que cuenta Marbella han cerrado sus puertas este invierno, principalmente establecimientos turísticos de tres y cuatro estrellas debido a la menor ocupación que se registra durante la temporada baja, según destacó a La Opinión la secretaria general del Sindicato de Servicios de Comisiones Obreras (CCOO) de Málaga, Lola Villalba, quien apuesta por incentivar a las empresas que permanezcan abiertas durante todo el año.

La dirigente sindical indicó que si bien este año la temporada alta se ha visto alargada en unos 15 ó 20 días «muchos hoteles cierran en invierno porque son de temporada o eran permanentes y se han convertido en estos años de crisis en hoteles de temporada», con instalaciones cerradas y los trabajadores en el desempleo y cambiando las condiciones laborales de las plantillas de aquellos que permanecen abiertos durante el invierno al ser trabajadores fijos discontinuos.

Navidad

La festividad navideña es un época en la que por regla general sube la contratación de personal de cara a satisfacer las necesidades de consumo que generan las fiestas, y que en el sector hotelero se traduce en contrataciones de días para cubrir eventos determinados como las cenas de Nochebuena o los cotillones de Año nuevo, señaló.

De este modo, la secretaria general del Sindicato de Servicios de CCOO destacó que las empresas tiran en estas fechas de los trabajadores que tienen fijos- discontinuos en primer lugar y en segundo de las contrataciones eventuales para uno o dos días, por lo que restó valor a la generación de trabajo que se produce en Navidad en los hoteles al generarse «muy poco empleo».

Además de la contratación mínima que se registra en Navidad, Villalba hizo hincapié en la precariedad de los empleos, ya que se dan «contratos a tiempo parcial» y se tira de la plantilla fija-discontinua, que pasa temporadas en el paro y temporadas ocupando un puesto de trabajo según las necesidades de la empresa, y que en una ciudad turística como Marbella suele producirse la mayor demanda de trabajadores en temporada alta.

Al hilo de ello, la sindicalista remarcó las «condiciones tremendamente malas» bajo las que se contrata a personal en restaurantes, bares y cafeterías al haber en los hoteles un mayor control de los sindicatos que nos se da en la restauración, con jornadas que superan las ocho o diez horas, mientras que el 90% de los contratos son de media jornada, dijo.

En términos generales, Villalba valoró que la mejora de la economía y de los datos turísticos no se ha reflejado en las contrataciones realizadas en el sector, así como aseguró que «en el sector turístico no existe crisis», aunque muchos hoteles de temporada han hecho muchos expedientes de regulación de empleo para «evitar una carga añadida de personal».