El subdelegado del Gobierno en Málaga, Miguel Briones, aseguró ayer que el Ejecutivo central se pronunciará sobre la propuesta del Ayuntamiento de Marbella de sufragar la estabilización de las playas con el superávit de los próximos años bajo diversas fórmulas de compensación, una vez que conozcan la iniciativa de manera detallada, tanto las condiciones como su viabilidad.

Así lo declaró Briones a preguntas de los periodistas en el acto de celebración del 50 aniversario del Hotel -Escuela Bellamar, donde destacó que se ha acogido la propuesta municipal «con cierta sorpresa» al haberse realizado a través de los medios de comunicación. «Entiendo que las instituciones tenemos que estar en un mayor grado de fluidez en las comunicaciones», por lo que valoró que quizás no haya sido la forma más adecuada.

En este sentido, apuntó que en las distintas reuniones y contactos que mantienen los alcaldes de la provincia y los subdelegados «estamos obligados a hacer esas propuestas y formularlas de manera más directa».

El subdelegado del Gobierno recordó que existe «un proyecto básico de infraestructuras para la estabilización de playas de Marbella de hace unos tres años que aún necesita el proyecto definitivo técnico de ejecución y su aprobación presupuestaria», por lo que señaló que desde el Estado se pronunciarán una vez que se conozcan más detalladamente los términos de la propuesta.

«Nosotros no vamos a decir que no, pero tampoco vamos a decir que sí sin saber todavía ni cuáles son las condiciones ni cuál es la viabilidad», siendo el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente el que debe pronunciarse sobre esa propuesta y conocerla en mayor grado de concreción, remarcó.

Para ello, el Ayuntamiento de Marbella solicitó una reunión con la Dirección General de Costas, que estaba prevista para el próximo 27 de abril y que por motivos que se desconocen desde la Administración local se ha pospuesto hasta el 4 de mayo, según indicó ayer el concejal de Turismo, Javier Porcuna.

Arreglo del litoral

Por su parte, el resto de municipios del litoral siguen evaluando los daños provocados por el temporal en sus playas. Así,el Ayuntamiento de Benalmádena los cifró ayer en 300.000 euros. La pérdida generalizada de arena, el descalce de muros y la desaparición o la destrucción de nuevo equipamiento recién adquirido son algunas de las consecuencias, informó ayer el Consistorio.

En Mijas, más de 60 operarios trabajan para recuperar las playas de la localidad y el Ayuntamiento calcula unas pérdidas cercanas a los 20.000 euros a consecuencia del temporal. Por ello, el área municipal de Playas reclamó ayer a Costas una mayor inversión para la provincia como uno uno de los destinos turísticos de mayor afluencia en España.

Mientras, Fuengirola también está trabajando en la reposición de arena perdida por el temporal. «De cara a Semana Santa llevamos a cabo una regeneración muy intensa. Se hizo un trabajo bueno, pero después de Semana Santa hemos sufrido un gran temporal, el más fuerte de los últimos 22 años, por lo que esa arena la hemos perdido prácticamente», explicó el edil de Playas del municipio, José Sánchez.