El Ayuntamiento de Marbella supeditará la prórroga de la licencia otorgada por el PP en el año 2012 a la organización del festival Starlite, cuyo convenio finalizó en 2016, a la ordenación urbanística de la cantera de Nagüeles. Para ello, el Consistorio ha expedido una licencia de demolición de las instalaciones fijas para ajustarse a los parámetros que marca la legislación en torno al auditorio, cuya calificación del suelo es no urbanizable de especial protección, según declaró ayer el portavoz del equipo de gobierno, Javier Porcuna.

Así lo destacó el representante local a preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno tras conocerse que la Fiscalía de Málaga ha denunciado a las dos entidades que organizan el festival y al administrador único de ambas por unas obras supuestamente irregulares. En este sentido, Porcuna destacó que el Consistorio ya venía trabajando de manera discreta antes de darse a conocer la actuación del fiscal para «dejar clara la situación urbanística de Starlite».

La decisión responde a varios expedientes que apuntan a la existencia de instalaciones de carácter fijo en la cantera en lugar de desmontables, por lo que el Ayuntamiento ha otorgado una licencia para su demolición y, a partir de ahí, se continuará con la tramitación del resto de autorizaciones relativas al horario, al canon o a los usos, según detalló el portavoz municipal.

«Primero hay que arreglar lo que hay que arreglar porque no hay lugar a una nueva licencia si no se ha solucionado lo que no se había dejado bien con la anterior licencia», señaló Porcuna, en relación a la prórroga del acuerdo alcanzado entre la organización del festival y el Ayuntamiento en 2012 durante el mandato del PP, período en el que aseguró que se hicieron las construcciones que investiga la Fiscalía.

Por este motivo, el portavoz municipal aseguró que ya el pasado año el Ayuntamiento requirió a los organizadores de Starlite ejecutar una serie de requisitos que no se estaban cumpliendo tras la advertencia de una delegación municipal y ante el informe presentado por la propia empresa que alertaba de riesgos de desprendimiento de rocas inminente y posibles.

De este modo, el Ayuntamiento instó a la organizadora del festival a llevar a efecto «una obra de reforma en la zona del perímetro de la cantera para asegurar algunas rocas que podían tener peligro de desprendimiento», para lo que se instalaron una mallas metálicas y barreras de protección en altura, además de ejecutar el Plan de autoprotección.

Porcuna subrayó que «Starlite tiene un efecto positivo para la ciudad desde el punto de vista promocional», y se le revisará el canon una vez que se prorrogue la concesión del espacio que otorga la Junta al Ayuntamiento.