Francisco Gil ha sido elegido recientemente presidente de la Agrupación de Cofradías de Marbella, afrontando una nueva etapa tras haber dirigido durante cuatro años la cofradía de La Pollinica, en la que quiere continuar con la unidad de las hermandades y conseguir que el colectivo tenga el peso en la Semana Santa de Marbella.
Después de dirigir cuatro años La Pollinica, ¿Por qué ha decidido presentarse a presidente de la Agrupación de Cofradías?
Mi mandato en La Pollinica ya llegaba a cuatro años y pensé en dejarlo porque creía que lo mejor para la cofradía era un cambio desde dentro para que fuera a mejor. Empezaron a comentarme si quería presentarme a la agrupación y entre unos cuantos me convencieron.
¿Cómo ha sido el paso de liderar la cofradía a la agrupación?
Es totalmente distinto porque en una cofradía al fin y al cabo estás tratando con tus hermanos, el día a día es totalmente distinto, en una cofradía es un poco más relajado.
¿Qué objetivos se ha marcado para estos cuatro años?
Mi intención es seguir con esa unión que hay entre las hermandades y entre los hermanos mayores de cada cofradía, y después darle a la Agrupación de Cofradías un peso que pienso que tiene que tener ante todas las hermandades, tanto de Pasión como de Gloria, y sentar unas bases para que todas las cofradías vayan en ese rumbo.
¿Qué proyectos piensa poner en marcha para ello?
En un principio, quiero empezar con la formación cristiana y cofrade en todas las cofradías, para lo que he nombrado a una persona como vocal de formación. Mi intención es que para comenzar a rodar se reúna con todos las hermandades para ver el tema de la formación junto con el director espiritual de las hermandades, que es Don José López.
¿Qué otras iniciativas se plantea incorporar?
Ahora mismo no tenemos prácticamente enseres, tenemos un estandarte y un trono, pero pienso que una agrupación de cofradías tiene que tener sus propios enseres e invertir para sacar algo de dinero y poder comprarlos. Para eso hace falta realizar actividades con el fin de recaudar fondos y tener esa solvencia.
¿Cómo está ahora mismo la Agrupación de cofradías?
La veo fuerte en el sentido de que hay mucha unidad entre todas las hermandades y eso es lo fundamental, pero también hay que darle esos toques como he dicho en La Pollinica, tiene que haber cambios para que haya ese revulsivo y hacer cosas nuevas.
¿Qué legado ha dejado el presidente saliente?
Salvador de la Peña ha dejado la Agrupación de Cofradías con un ambiente fantástico; a partir de ahí, mi intención es potenciar ese ambiente tan bueno que hay entre hermandades y conseguir entre todos algo grande para que esta agrupación reciba apoyo de las hermandades, pero también apoyarlas a todas.
¿Cuáles son las primeras medidas que va a poner en marcha?
Lo primero que vamos a hacer es empezar a sentar las bases. Yo ya me reuní con mi Junta de Gobierno y vi el camino que teníamos que seguir. Dentro de poco habrá una primera reunión de la agrupación para empezar a rodar. Esto es una carrera de fondo y tenemos que estar esos cuatro años a tope para que cuando terminemos nuestra legislatura conseguir el fin con el que hemos entrado, que esta Agrupación de Cofradías tenga un peso bastante importante dentro del mundo cofrade de Marbella.
¿En qué sentido?
En que la agrupación no esté simplemente para reunirse y decidir dónde va la tribuna o el reparto de la subvención, sino que sea parte importante en la Semana Santa de Marbella, sentar una base de protocolo para todas las hermandades a la hora de hacer actos de culto y procesión, y que todo eso esté dirigido por la Agrupación de Cofradías.
