Alexander Grinberg, presidente del Marbella FC detenido este martes junto a otros directivos en una operación contra la mafia rusa, llegó al club en 2013 y se convirtió en el hombre que reflotó el fútbol en esta localidad costasoleñay en el gran artífice de su éxito, al pasar de Tercera a Segunda B.
El empresario ruso, tras desembarcar en 2013 en la entidad marbellí, logró ascender al equipo a Segunda B hace cuatro temporadas después de que adquiriera el club cuando estaba casi en quiebra, tras lo que lo saneó y lo convirtió en Sociedad Anónima Deportiva (SAD).
El equipo, con su anterior denominación de Unión Deportiva Marbella, fue fundado en 1997 por el farmacéutico marbellí Antonio José Pérez Ramos y es heredero de la unión del antiguo Club Atlético de Marbella con las canteras de otros dos clubes locales, como la Unión Atlético Marbella y el CD Cultural.
Tras deambular por Tercera División, en la temporada 2002-03 alcanzó la segunda plaza de la Liga y subió a Segunda División B, aunque después de siete campañas descendió de nuevo a Tercera.
En ese momento, el multimillonario ruso Grinberg, de 48 años, afincado en esta ciudad de la Costa del Sol desde hace casi una década y un enamorado tanto del fútbol como de Marbella, tomó las riendas del club en febrero de 2013, se hizo cargo de las deudas pendientes con plantilla y cuerpo técnico y salvó al equipo de la quiebra.
El 28 de junio de 2013 se hizo oficial el nuevo nombre de Marbella FC, que lleva cuatro temporadas en la categoría de bronce del fútbol español, rozando la pasada temporada la clasificación para la fase de ascenso, aunque un tramo final con muchos errores le condenó al ostracismo, tras estar buena parte del campeonato entre los cuatro primeros e incluso líder durante muchas jornadas.
En estas cuatro campañas, de la mano de Grinberg, han sido numerosos los jugadores fichados por los marbellíes, al igual que entrenadores como Pablo Alfaro, Aitor Larrazábal, Mehdi Nafti o el actual Fernando Estévez.
El objetivo es ascender a Segunda División, un reto que el empresario ruso se propuso desde el principio, para lo que dotó a la entidad de una infraestructura prácticamente profesional y lo transformó en SAD la pasada campaña, además de crear recientemente la Fundación Marbella FC para potenciar los valores del deporte y de surtir al club de numerosos patrocinadores y socios, entre ellos Agua Sierra Mijas, otra de las empresas implicadas en esta trama.
El Marbella ocupa en la actualidad ocupa la novena posición del Grupo IV de Segunda B con 10 puntos, con tres victorias, un empate y dos derrotas.
A Grinberg, a su vicepresidente, German Pastushenko, y a los otros nueve detenidos este martes en Málaga, entre ellos uno de los capos de la mafia rusa Solntsevskaya, Arnold Arnoldovich Tamm, se les imputan delitos de pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales y contra la hacienda pública.
