El equipo de gobierno de Marbella dispondrá de 36 millones de euros más de lo que establece la regla de gasto para los presupuestos municipales de 2018, último año antes de las elecciones municipales de 2019, según un informe que la Intervención municipal elaboró el 10 de noviembre y que ha entregado a los grupos políticos de la oposición.
El incumplimiento de la norma permitirá al equipo de gobierno gastar 215 millones de euros de un presupuesto de 246 (la diferencia son gastos que no computan a la hora de fijar el techo de gasto) en lugar de los 180 a los que tendría que ceñirse si respetara la norma impulsada por el ministro Cristóbal Montoro (PP).
El Interventor destaca que las cuentas de 2018 garantizan la estabilidad presupuestaria del Ayuntamiento, pero advierte de que el incumplimiento de la regla de gasto obliga al Consistorio a elaborar un plan económico y financiero con el que ajustarse a la norma en un año. El Ayuntamiento tendrá que remitir el informe a la Dirección General de Coordinación Financiera con Entidades Locales, que depende del Ministerio de Hacienda, en un plazo de 15 días desde el conocimiento del plan por parte del Pleno.
La intención del equipo de gobierno es tramitar la aprobación de las cuentas municipales durante noviembre y diciembre para que entren en vigor el 1 de enero y garantizar la completa ejecución de las partidas.
El Gobierno local aprobó las cuentas de forma inicial el lunes en Junta Local de Gobierno, mañana las presentará en comisión informativa y el viernes las elevará a un pleno extraordinario en el que, previsiblemente, se aprobarán con el apoyo de las dos formaciones que gobiernan Marbella: PP y OSP.
Reacciones
«Nos preocupa que el acuerdo con Hacienda sea un apaño a corto plazo para lograr más capacidad de gasto y que luego suponga la obligación de un plan de ajuste que lastre a la ciudad en ejercicios futuros, cuando el PP no gobierne, o conlleve recortes en derecho fundamentales o empleos. Tememos que sea un acuerdo trampa», señaló ayer el portavoz de IU, Miguel Díaz.
La concejala de Podemos Victoria Mendiola recordó que su formación propuso incumplir la norma en 2016. «Fuimos tachados de radicales por el mismo concejal de Hacienda que ha visto la luz y toma la misma medida», agregó.
El edil de Hacienda, Manuel Osorio, respondió en una emisora de radio que incumplir la regla de gasto no es sinónimo de romper la estabilidad presupuestaria. «Podemos quería gastar más de lo que ingresamos. Y eso no es posible», dijo.
Según Podemos, el equipo de gobierno empleará la mayor parte del gasto extra de 2018 en privatizar los servicios municipales y no en mejorarlos. «Estos buenos gestores del PP y OSP no gestionan, sino que contratan a otros para que lo hagan. Los servicios de todos se convierten en el negocio de unos pocos», señaló la edil.
La concejala del PSOE Isabel Pérez advirtió de las consecuencias que podrá generar el incumplimiento. «Veremos adónde nos lleva o si vamos a tener que afrontar un plan de ajuste. Nos habría gustado que el Consistorio hubiera mantenido el cumplimiento», indicó.
