Robert de Niro confía en que Donald Trump nunca visite Marbella. Si es así, el presidente de los EEUU podría cenar en el restaurante del Hotel Nobu, en cuyo caso el actor y director se vería obligado a abandonar el local a pesar de formar parte del establecimiento hotelero que inauguró ayer en la Milla de Oro y del que es propietario junto al chef japonés Nobuyuki Matsuhisa y el productor de Hollywood Meier Teper. «Si él está en un restaurante al que yo llego, obviamente me voy a ir de ahí», aseguró el actor, que mostró sus preferencias por las cenas románticas con sake, la bebida alcohólica nipona elaborada con arroz, y la buena cocina.

Alguno de los dos, De Niro o Trump, se perderían los mariscos y el pescado, sobre todo el atún de Gibraltar, de la zona y que son la clave de la cocina del restaurante de Nobuyuki Matsuhisa. «Aquí hay un gran pescado, como el que tenemos en Japón. Es importante tener buenos productos para elaborar los mejores platos y ofrecer los mejores servicios», señaló Matsuhisa.

«Es un placer estar hoy en Marbella porque me encanta venir a España», dijo el protagonista de Toro Salvaje o El Padrino II, que llegó a la ciudad al filo del mediodía en helicóptero. Hace 30 años se embarcó en el mundo de los negocio con la apertura del restaurante Tribeca Grill en Nueva York, tras rodar una película en La Gran Manzana. «Fuimos teniendo éxito, creciendo y abriendo más restaurantes hasta que, hace unos 10 o 15 años, surgió la posibilidad de combinar el restaurante con un hotel», dijo. Fruto de esa alianza con Matsuhisa y Taper nació en 1994 el primer restaurante Nobu y en 2013, el primer Nobu Hotel en Las Vegas.

Actualmente, la cadena cuenta con establecimientos en Londres e Ibiza, abrirá uno en Barcelona a finales de este año o inicios de 2019 y busca emplazamientos para instalarse en Madrid, Portugal, Riad, Chicago, Toronto, Sao Paolo y Atlanta. «El enfoque estratégico de Nobu consiste en seguir ampliando su cartera de desarrollo», señalan.

De Niro, dos veces ganador de un Óscar, es el responsable de la dirección creativa de los restaurantes y Teper, «la vanguardia y exclusiva visión propia de esta marca a todos los hoteles y experiencias Nobu».

Una de las razones de la expansión de la cadena hotelera Nobu es la calidad de los platos de Matsuhisa, «que la gente aprecia y que fue una de los motivos por los que me embarqué en esta empresa», señaló De Niro.

El chef japonés, que ha pasado largas estancias en Perú, Argentina o Alaska hasta que se estableció en Nueva York de forma definitiva, abrió su primer restaurante, Matsuhisa, en Beverly Hills en 1987.

De Niro, Matsuhisa y Teper celebraron ayer la ceremonia del sake, una tradición japonesa que los copropietarios de la cadena hotelera realizan en las inauguraciones de los establecimientos. Para ello, llenaron un barril, de tapa redonda para simbolizar la armonía, con un sake especial de Nobu que rompieron con mazos de madera. El sake que se derrama se sirve a los asistentes a la inauguración para que brinden, entre farolillos japoneses flotantes, tambores taiko y cócteles y platos gastronómicos del chef nipón, por la buena suerte del local.

El Hotel Nobu de Marbella, ubicado en el interior del Hotel Puente Romano, cuenta con 49 habitaciones y suites sólo para adultos de entre 45 y 120 metros cuadrados. El objetivo es ampliar el número hasta 81 a mediados de 2019.