CCOO instó ayer a la Junta de Andalucía a que drague «de forma urgente» el puerto de La Bajadilla para garantizar la seguridad del tráfico marítimo y los trabajadores del sector pesquero, que se encuentran en «situación de riesgo» ante el abandono en el que, según el sindicato, se encuentra la marina.

La situación jurídica en la que se encuentra el puerto tras los incumplimientos de la Unión Temporal de Empresas formada por el jeque catarí Abdullah Al-Thani y el Ayuntamiento de Marbella -que asumió la concesión del recinto portuario en 2011 y que han provocado la apertura de un expediente de reversión- no exime a la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA), que depende de la Junta, de su «responsabilidad» en la seguridad en la entrada y salida de las embarcaciones de recreo o pesca ni de las consecuencias laborales y económicas que se derivan, señaló el secretario general de CCOO en Málaga, Fernando Muñoz Cubillo.

El líder sindical acusó a la Junta de no invertir en mejoras de las instalaciones del puerto pesquero o el dragado de la bocana a pesar de que el Gobierno regional a previsto 13,5 millones de euros para invertir en las marinas andaluzas en 2018. «El puerto de La Bajadilla está fuera de inversión. Marbella ha quedado fuera de esta inversión. El sector pesquero no es prioritario para la Junta. Si la situación de inseguridad afectara a los yates ya se habría hecho», señaló Muñoz Cubillo.

CCOO en Málaga ha denunciado en diferentes ocasiones la situación de «dejadez del puerto e inseguridad para los trabajadores» por parte de la Junta, indicó la secretaria general de la FSC del sindicato, Carolina Ortiz. La dirigente sindical atribuyó a reivindicaciones de CCOO y de la Cofradía de Pescadores de Marbella la aprobación en el pleno de febrero de una moción en la que la corporación municipal instaba a la Junta a que dragara, limpiara y mantuviera en buenas condiciones el recinto portuario.

El responsable del sector pesquero del sindicato, Pedro Ruiz, señaló que la «falta de atención» que atribuyó a las administraciones pública «repercute económicamente y también en la seguridad de los empleados». «Los barcos de gran envergadura se encuentran en riesgo al realizar las maniobras de entrada al puerto por la falta de dragado. Si un barco no puede entrar ni descargar su pesquera, el puerto se queda desabastecido y los trabajadores y la lonja pierden», añadió.

Las embarcaciones pesqueras de mayor cerco llegarán al puerto de La Bajadilla el 1 de junio, según el patrón mayor de la Cofradía de Pescadores, Manuel Haro. Si para entonces la Junta no draga la bocana del puerto, «tomaremos medidas», señaló.

La Opinión de Málaga solicitó ayer su versión a la Agencia Pública de Puertos de Andalucía, sin resultado alguno.