Comunicación e igualdad de género

Durante la charla, los jóvenes pudieron conocer cuáles son los requisitos para realizar correctamente una noticia relacionada con la violencia de género, así como cuáles son los errores más comunes que los medios cometen y que no se debe hacer nunca en este tipo de informaciones para no herir la sensibilidad del público o invadir la intimidad de las víctimas.

Además, este taller aportó datos sobre desigualdad en el trabajo, la representación de la mujer en los medios de comunicación, inferior a la del hombre, sobre todo en casos de entrevistas a expertos que son mayoritariamente hombres. En el caso del mundo del periodismo, también se informó a los jóvenes sobre algunos estereotipos arraigados a la hora de designar temas en una redacción, dependiendo de qué tema sea y si se le concede a una mujer o un hombre.

«No tenía ni idea de que la mujer estaba tan mal representada en los medios de comunicación», explicó Celina Salido, de 16 años, que aseguró, que siempre ha oído hablar de «las desigualdades que existen en nuestra sociedad entre hombres y mujeres», pero «nunca me había dado cuenta de que también se produce a través de algunos medios de comunicación». En este sentido, Claudia García, de 15 años, apuntó que «no podía imaginar que incluso para realizar una entrevista especializada se priorice antes el testimonio de un hombre que el de una mujer, nos han explicado que cuando se trata de entrevistar a expertos, hay mayor porcentaje de hombres que de mujeres».

Claudia García, de 15 años, opinó que «no está bien que esto suceda». Además, la joven destacó que no comprende por qué «cuando una mujer es periodista, a veces en el medio de comunicación se le asignan temas que son considerados más aptos para mujeres, como por ejemplo, los cotilleos, no considero que eso sea justo ni igualitario».

En el caso de Ainhoa Guirado, de 15 años, lo que más le sorprendió fue «saber que la categoría profesional en la que la mujer está más representada en los medios es ama de casa», lo que consideró que «no está mal, porque no es algo malo, pero las mujeres tenemos muchas profesiones y eso debería verse reflejado en los medios de comunicación».

Violencia de género en los medios

Los jóvenes realizaron una actividad en la que se expusieron varias noticias relacionadas con la violencia de género. Después de la charla recibida previamente y las pautas para reconocer una noticia sensacionalista o no, pudieron decidir si lo que estaban leyendo era una información elaborada de forma correcta o no.

«Mi artículo estaba bien escrito, la verdad que no era nada sensacionalista ni explicaba cosas que pudieran invadir la intimidad de la víctima», explicó David Cabello, de 15 años, quién además señaló que tras los visto en clase «es necesario que los medios tengan cuidado a la hora de informar sobre estos temas».

Ángel Montosi, un joven también de 15 años, destacó que ha aprendido muchas cosas que no conocía gracias a la charla. «Te das cuenta de cosas en las que nunca te había fijado, cosas que se hacen mal desde los medios. Por ejemplo, hemos visto que a veces los medios, sin querer, excusan al hombre que ha cometido el delito en algunas ocasiones. Mi artículo hablaba del asesinato de una mujer mayor a manos de su marido en Getafe y la verdad es que en ese mismo artículo sucede esto».

Por su parte, Carlos Moreno explicó que no considera que «los medios lo hacen mal, pero sí que es verdad que no deberían informar de forma sensacionalista como en el artículo que me ha tocado para la actividad». Asimismo, resaltó que «deben tener cuidado porque hay cosas que es mejor no publicar, información o imágenes, ya que pueden afectar tanto a la víctima como a las familias».

También llamó la atención de estos estudiantes un tema muy concreto, la representación de la mujer en este tipo de casos. Lucía Pérez, de 14 años, apuntó que «hay mucho sensacionalismo, no se centran en otros aspectos y se dedican a exponer a la mujer como la víctima sin centrarse, por ejemplo, en que debe eliminarse de forma radical la violencia de género».

No sólo desde los medios de comunicación, sino que también, de forma general, la charla suscitó en los jóvenes el interés por la igualdad de género en la sociedad. Todos coincidieron en que siempre les han hablado sobre este tema, pero no habían llegado a comprender nunca el alcance que llegaba a tener. «A partir de ahora voy a fijarme, no sólo en la información que se publique, que también, sino además también en pequeños detalles del día a día que fomentan la desigualdad, como comentarios en clase», destacó Juan Sánchez.

La desigualdad, representada en los medios, puede convertirse en una herramienta que fomente estas actitudes, por lo que enseñar a los jóvenes las prácticas incorrectas es esencial para que la sociedad avance hacia una igualdad real.