Bajo el título «Qué es un medio de comunicación, cómo se elabora un periódico», una veintena de estudiantes de último curso de la ESO del IES Mare Nostrum recibieron algunas nociones básicas del oficio de periodista, de la forma en que los profesionales siguen concibiendo aún hoy el periodismo pese a los profundos cambios experimentados y de las técnicas empleadas para elaborar textos informativos. El objetivo no era otro que lograr la inmersión de los adolescentes en el mundo de la información, fomentar en ellos la curiosidad por el periodismo de siempre, aunque su formato y forma de lectura hayan cambiado. Un vídeo de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra, dedicado a lo últimos periodistas de guerra fallecidos, abrió esta primera sesión con mensajes como «digan lo que digan, pocas profesiones son tan apasionantes. Celebrating Journalism». Como ideas básicas se les expuso que los medios de comunicación siguen siendo la manera más eficaz y rápida de transmitir un mensaje a la sociedad y que se trata de elementos imprescindibles en las sociedades libres y democráticas. El compromiso del periodista sigue siendo la veracidad del relato, contar lo que pasa de la manera más honesta y profesional posible aplicando el dogma de que «los hechos son sagrados, las opiniones libres». El objetivo del periodista no pasa sólo por informar sobre la realidad, sino por controlar al poder y servir al ciudadano, auténtico depositario del derecho a la información. Una cita del periodista Rafael Mainer, de 1906, bien podría servir hoy de ejemplo cuando afirma que «los periódicos serán necesarios... siempre que haya injusticias que denunciar, débiles a quiénes amparar», entre otros objetivos.

Los alumnos conocieron también las distintas formas de contar las cosas, lo que en la profesión se denominan géneros periodísticos; el informativo, el interpretativo y el de opinión. Tras visualizar algunos ejemplos actuales de todos ellos, y de su evolución en formato de papel, el taller puso el acento en la noticia, la forma más clara y objetiva de contar un hecho. Pero ¿cómo sabemos que algo es una noticia? Al margen del oficio o el propio olfato del profesional, la teoría de Carl Warren fija diez elementos fundamentales para determinar si un hecho es o no susceptible de ser noticioso. Los dos condicionantes principales son que se trate de algo que acaba de producirse o conocerse y su proximidad al lector. Las repercusiones del hecho, la relevancia de su protagonista, el suspense, lo raro, lo que emociona, el sexo o lo relativo al progreso son otros elementos noticiosos. También conocieron los alumnos cómo estructurar una noticia, desde poner un titular que resulte atractivo para el lector con los elementos básicos del hecho, añadir los antetítulos y subtítulos que complementan al título y elaborar una entradilla o «lead» que compile la información principal; lo que comunmente se conoce como las cinco W: qué, quién, dónde, cuándo, y por qué. El cuerpo central de la información, estructurado en párrafos de mayor a menor importancia, precedido en algunos casos por un hecho anterior relacionando, son el resto de elementos fundamentales. A todo ello se añaden las imágenes y gráficos que completan una noticia. La clase se centró además en el género de la opinión, donde se analiza, interpreta y enjuicia un hecho relevante y que goza de una gran libertad expresiva.

Los alumnos aprendieron algunos métodos de trabajo del periodista para recopilar informaciones con imágenes de ruedas de prensa donde se presentan acontecimientos relevantes como fue el reciente Festival de Cine, una convocatoria en plena calle o el seguimiento a una sesión de un juicio en la Audiencia Provincial de Málaga.

El derecho a la libertad de expresión, amparado en el artículo 20 de la Constitución cerró el amplio capítulo dedicado a la elaboración de los periódicos, para concluir con algunos apuntes más actuales. Como ejemplo de la rápida conversión de los lectores de papel al formato digital, el curso celebrado en el Instituto Mare Nostrum puso el ejemplo del cierre de la edición de papel de uno de los grandes diarios de la prensa británica, The Independent, en marzo del 2016, así como el hecho de que sólo un 8 por ciento de los alumnos de Bachillerato en España se informa de la actualidad a través de los periódicos impresos y opta en su mayoría por medios online y redes sociales, según un estudio de Círculo Información.