Cuarenta años en su casa del Castillo en Manilva y ahora la Demarcación de Costas quiere derribarla. Esa es la situación que vive Miguel Villalobos y medio centenar de vecinos más de esta zona del municipio. Y es que Costas, del Ministerio de Medio Ambiente, ha fijado el deslinde marítimo terrestre en una zona que dejaría sin casas a cincuenta familias y sin negocio a otras tantas. La situación no es fácil y los vecinos se sienten desprotegidos y ninguneados por esta ley que aún no consiguen entender.

Mucho menos cuando a pocos metros de sus casas se levantan grandes bloques de pisos en el Puerto de la Duquesa que, en su opinión, Costas sí ve con buenos ojos. Precisamente, según explica Miguel Villalobos, la construcción de este puerto y sus sucesivas ampliaciones han provocado que el mar haya ganado terreno frente a sus casas y hayan tenido que construir una pared para evitar las embestidas del mar.

Y es que en el año 1969 cuando Miguel construyó su vivienda, donde viven cinco personas, la distancia desde su casa a la Costa tenía más de 105 metros, mientras que ahora sólo la separan unos cuantos pasos. A pesar de todo, se niega a perder su vivienda por la que paga sus impuestos y por la que ha trabajado toda su vida. Así lo contaba a este periódico al tiempo que mostraba sus antiguos recibos de contribución, anteriores a la ley de Costas que se puso en marcha en 1988.

La lucha de este y otros vecinos se centra en mantener sus casas o bien en que Costas les ofrezca otra digna para vivir, algo que hasta la fecha no ha ocurrido. A ellos se ha unido también el Ayuntamiento que periódicamente se reúne con los vecinos y cuya alcaldesa, Antonia Muñoz, ha pedido a Costas en varias ocasiones que dé marcha atrás en su intención de derribar estas viviendas.

Junto a los vecinos se encuentran también varios empresarios, la mayoría de restaurantes de pescaítos, famosos en la zona, y que en algunos casos han contratado abogados particulares para luchar contra esta decisión de la Demarcación de Costas.

Alegaciones. Ante esta situación el Ayuntamiento ha habilitado una oficina para que los vecinos presenten alegaciones individuales al deslinde marítimo terrestre propuesto por Costas antes del 14 de agosto. La alcaldesa ha manifestado que el Ayuntamiento defenderá a los vecinos. Su argumento se basa en que las viviendas tienen derechos consolidados, una antigüedad de más de 50 años y, además, la situación del litoral en esta zona del término de Manilva se vio muy afectada por la construcción del Puerto de la Duquesa.

Los vecinos, por su parte, muchos jubilados, esperan con inquietud el futuro incierto de sus viviendas.