El presidente de la Comisión Mixta Congreso-Senado para la UE y diputado del PP, Miguel Arias Cañete, ha calificado hoy como una "oportunidad perdida" el semestre de presidencia española en la UE.

Arias Cañete, que ha participado en Ronda (Málaga) en el curso de verano de la Universidad de Málaga "La crisis: un análisis global", ha afirmado a los periodistas que "lo más positivo" del semestre ha sido que "afortunadamente" se ha obligado al Gobierno a afrontar los problemas más graves que tiene la economía española, un déficit "galopante" y una falta de competitividad.

El ex ministro ha destacado que se trataba de una presidencia de "transición e importante" que se ha visto "salpicada" por acontecimientos que la han hecho "muy complicada", como la situación de quiebra de Grecia.

Aun así, ha manifestado que si no se hubieran generado tantas expectativas "por ignorancia o demagogia" se haría un juicio distinto, ya que la Unión Europea está solucionando sus problemas, mientras que en España la problemática es "más aguda".

El diputado popular ha declarado que a la crisis financiera se suma la tardanza por parte del Gobierno en poner reformas estructurales "con poca convicción y escasa habilidad" que perjudica a los más débiles.

También ha sentenciado que "no tiene sentido" que sean los funcionarios y pensionistas los "paganos" de esta crisis debido a la "falta de valor político" para decir a los ciudadanos la verdad y hacer los ajustes de gasto público "de manera inteligente".

Por otro lado, el vocal de la Asociación Atlántica Española Rafael Monsalve ha declarado que en la Unión Europea hay una falta de transparencia por parte de las instituciones y existe una disgregación de los territorios en vez de una "gran Europa".

Algunas de las cuestiones que ha planteado es el lenguaje que utilizan, ya que el ciudadano "no entiende" lo que dicen, y ha subrayado la necesidad de un lenguaje común para toda Europea.

También ha realizado un llamamiento a todos los jóvenes para que "se interesen" en el proyecto de Europa a través de los diferentes mecanismos viables como el Parlamento Europeo de los jóvenes y no la vean como un "posible" puesto de trabajo dentro de ella, sino como el "desafío".