La idea de unir el municipio de Ronda con el núcleo marbellí de San Pedro Alcántara mediante una autopista de peaje no gusta a todos. El Foro Global 21 la rechazó ayer por mayoría al considerarla insostenible desde el punto de vista ecológico y económico, informó el colectivo Ecologistas en Acción.
La decisión obliga al diputado de Medio Ambiente y presidente del Foro, Miguel Esteban Martín, a presentarlo ante el pleno de la Diputación provincial. El ente supramunicipal ya aprobó por unanimidad la iniciativa en 2005 y, hace apenas unos días, rechazó con los votos favorables de populares y socialistas una propuesta de IU para pedir que se retirara, recordó el colectivo.
El Foro Global 21 forma parte de uno de los programas desarrollados por la Diputación: la Agenda 21 de Málaga. Entre sus objetivos, está el de tratar los asuntos que afectan al medio ambiente y territorio de la provincia.
La construcción de esta autopista de peaje de unos 33 kilómetros de extensión ocasionaría «daños importantes e irreversibles» en la zona, en opinión del Foro. «En primer lugar, hay graves errores en los aspectos científicos del proyecto», según indicó el secretario de Ordenación del Territorio de la federación malagueña de Ecologistas en Acción, Rafael Yus.
La composición de la flora y la fauna está mal reflejada en los estudios previos, sostiene. «Una negligencia imperdonable en la redacción de un informe, ya que sus autores ni siquiera se molestaron en tomar los datos de campo. Este es un hecho que, por sí mismo, invalida el estudio de impacto ambiental», añadió.
Explicó que los supuestos beneficios económicos para la comarca no son tales. «En lugar de desarrollarse, se aceleraría la litoralización de la comarca, polarizando su actividad hacia una Costa del Sol que ya de por sí está saturada en mercado de trabajo», afirmó. Por otro lado, se abrirían expectativas de desarrollo urbanístico en la zona, que posee parajes «de gran fragilidad». Su financiación «cargaría» sobre las arcas públicas y su gestión exigiría de peajes importantes para «compensar» el escaso uso, concluyó.
