En marzo de este año, el Gobierno español decidió bloquear los planes urbanísticos del coronel Gadafi, que gobierna Libia desde 1969 y contra el que su pueblo mantiene una sublevación que está contando con el apoyo de la comunidad internacional.

El representante del Libyan Foreing Bank en España solicitó en 2007 la urbanización de gran parte de los terrenos que tenía en el término municipal de Benahavís. El proyecto, o plan parcial en este caso, incluía la construcción de un hotel, un campo de golf y un total de 1.915 viviendas en apenas 480 hectáreas urbanizables con los que contaba la extensión del municipio costero. El Ayuntamiento denegó su permiso. Sin embargo, los propietarios de los terrenos volvieron a insistir tres años más tarde, ya que a principios de 2001 el Ayuntamiento de Benahavís recibió un escrito de la Dirección Territorial de Sevilla, un organismo dependiente de la Junta de Andalucía.

En la misiva se le preguntaba a la Administración local si le interesaba que los terrenos fuesen catalogados como de interés turístico, para incluirlos dentro del decreto de los campos de golf.

Sin embargo, el Gobierno español optó por acabar con cualquier iniciativa y decidió paralizar cualquier actuación urbanística en la zona por parte del coronel libio.

Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores informaron de que el Ejecutivo tomó esta decisión después de que la ONU y la UE establecieran sanciones a Gadafi y ordenaran la congelación de bienes y cuentas. Con la inmovilización de esta propiedad, situada en la provincia de Málaga, el Gobierno español ha evitado que el dictador o su entorno utilicen la finca con fines lucrativos.