Dos pueblos de la Serranía de Ronda, Benaoján y Montejaque, tienen limitado el acceso al agua potable desde el mediodía del pasado viernes, cuando la Consejería de Salud envió un informe advirtiendo de la contaminación del pozo de agua que suministra a ambas localidades.

La prohibición del consumo de agua fue una decisión de ambos ayuntamientos, junto al presidente de la Diputación, Elías Bendodo, técnicos y el cuerpo de la Guardia Civil. Frente a este contratiempo y para facilitar la vida de los vecinos el Tercio Alejandro Farnesio IV de La Legión ha desplazado hasta Benaoján y Montejaque camiones cuba de agua potable que poseen una capacidad de 2.000 litros y que se van remplazando continuamente.

Para informar del peligro de consumo de agua en Montejaque, se colocaron en distintos puntos del pueblo bandos de advertencia. Por su parte, el acalde de la localidad, Diego Sánchez, baraja la posibilidad de buscar alternativas que faciliten dejar de usar, en la medida de lo posible, el pozo la captación de agua de Benaoján.

Tras la alarma creada en ambos municipios, Francisco Gómez, alcalde de Benaoján, solicitó un contraanálisis cuyos resultados han arrojado que el pozo no está contaminado, lo que pone ahora en duda el análisis primero que hiciera la Delegación de Salud y que aseguró que la captación tiene residuos fecales.

«La Delegación de Salud se ha equivocado», aseguró el regidor benaojano, que señaló que «exigirá responsabilidades».

No obstante, Salud insistió ayer en que el agua está contaminada y que han detectado coliformes fecales que desaconsejan su consumo.