Los cortes eléctricos que se han producido en el municipio de Benaoján mantienen a los vecinos sin posibilidad de hacer uso de algunos servicios públicos que afectan principalmente al ámbito cultural y de ocio, ya que la biblioteca ha reducido su horario a dos horas y el centro Guadalinfo se ha visto obligado a cerrar sus puertas. Además, muchos hogares siguen sin disponer de señal de televisión.

Ante esta situación, los vecinos se muestran indignados, puesto que se convierten en las víctimas de un enfrentamiento entre el Ayuntamiento de Benaoján y la empresa Eléctrica de la Serranía de Ronda. «Los vecinos siempre somos los más afectados. Queremos que se pongan de acuerdo y se solucione la situación, ya que pagamos nuestros impuestos y tenemos derecho a ver la televisión y disponer de todos los servicios municipales», afirmó Judith Fernández, una de las vecinas del pueblo, quien añadió que «hay muchos ancianos que viven solos y se sienten acompañados gracias a la televisión. Hay quien tiene vídeo comunitario, incluso algunos vecinos están orientando las antenas hacia Montejaque y Ronda para coger señal, pero no siempre se ve correctamente».

La bibliotecaria del municipio, Ana Villalba, aseguró que «no se pueden realizar las tareas para las que está destinada la biblioteca municipal, al no poder utilizar el ordenador para atender correos, estadísticas y demás». Por su parte, el centro Guadalinfo ha visto interrumpida su actividad, por lo que «ahora se están reforzando las actividades externas, ya que se hace imposible continuar con los cursos que se desarrollan aquí», según informó su dinamizador, Víctor Hoces.

Por su parte, Francisco Gómez, alcalde del municipio, insistió en que está a la espera de la resolución judicial para llevar a cabo las medidas necesarias, «pagando la deuda a la empresa si así lo decidiese el juez». Además, el regidor anunció que el Ayuntamiento de Benaoján vuelve a tener acceso a internet gracias a una vía facilitada por la Diputación de Málaga, hecho que ha permitido que se reanude el trabajo habitual de los funcionarios.

Por su parte, una de las abogadas de la compañía Eléctrica de la Serranía, Carmen Narváez, aseguró ayer que «el alcalde llegó incluso a negarse a firmar los documentos para aplazar la suspensión». Además, matizó que no exigen el pago de golpe, sino «que se pretende sellar un convenio para que el Ayuntamiento haga frente a la deuda de forma progresiva».