La Guardia Civil a caballo patrulla desde hace varias semanas los campos de la provincia para evitar que se produzcan nuevas oleadas de robos como las que han afectado en el último mes a los cultivos malagueños, especialmente a la comarca de Antequera. Se trata, en la mayoría de los casos, de bandas organizadas que roban para convertir rápidamente el producto en dinero.
El modus operandi casi siempre es el mismo: sustraen las cosechas según se vayan recogiendo, desde aceitunas a aguacates, mangos, melones, alcachofas, cítricos o castaña, barriendo la provincia de extremo a extremo. «En la zona de la comarca de Antequera, aunque sí es cierto que los hurtos son considerables, han descendido con respecto a otros años. Se están dando más en la Axarquía y el Guadalhorce, donde sustraen el cobre de las infraestructuras del regadío y las aceitunas de los olivares», explicó Carlos Carreira, técnico de Asaja Málaga.
Precisamente, en el último mes los robos se han cebado con los cultivos de aceitunas de la zona de Archidona. Alrededor de 60.000 kilos de aceitunas han desaparecido de los olivos, lo que ha supuesto una pérdida económica para los agricultores de unos 24.000 euros. «Hemos sufrido cuatro o cinco robos diarios, algunos importantes, y otros de menor cuantía. Además, también desvalijaron cortijos llevándose enseres, edredones, comida, cables y todo lo que encontraron a su paso», manifestó Manuel Caro, gerente de la Sociedad Cooperativa La Purísima de Archidona.
El destacamento de la Guardia Civil encargado de este servicio está formado por un grupo de quince agentes que trabajan, por parejas o tríos, en turnos de mañana y tarde, y por la noche es la seguridad privada de los propios cultivos quien se encarga de la vigilancia. «Se trata de un servicio que se realiza en toda España desde el mes de abril del pasado año, para prevenir robos en explotaciones agrícolas y ganaderas», señaló el sargento José Collado, encargado de organizar las patrullas.
Esta seguridad privada, unida a la caballería de la Benemérita, está dando resultados muy positivos, ya que se ha producido un descenso del número de robos, prácticamente inexistentes desde hace un par de semanas.
Aún así, y a pesar de que la nueva vigilancia está dando buenos resultados, los agricultores exigen un mayor control en los puntos de compra-venta, sobre todo en municipios de la zona como Pedrera, Los Corrales o Casariche, donde no se pide a los vendedores la documentación que acredita que la aceituna o el producto es de procedencia legal.
En este sentido, el presidente de Asaja Málaga, Carlos Blázquez, mantuvo una reunión el pasado lunes con el nuevo subdelegado del Gobierno en Málaga, Jorge Hernández Mollar, al que le trasladó la preocupación de los agricultores malagueños por esta lacra que se ha instalado de forma permanente en el campo malagueño y que crece de forma exponencial cada año.
LAS CLAVESROBOS¿Cuáles son los productos que prefieren los ladrones del campo?
Roban las cosechas según se vayan recolectando, aceitunas, aguacates, mangos, melones, castañas o cítricos, recorriendo la provincia al completo y desvalijando incluso algunos cortijos de la zona.
ASAJA MÁLAGA¿Qué reivindican los agricultores a las administraciones?
Asaja ha solicitado a la Subdelegación del Gobierno en Málaga incrementar la vigilancia en los campos de la provincia para eliminar esta lacra que cada año se ceba con los cultivos.
AGRICULTORESMayor eficacia en los controles de compra-venta de productos
Los agricultores de la provincia precisan de mayor seguridad en sus terrenos, pero, sobre todo, hacen hincapié en la necesidad de intensificar la vigilancia en los puestos de compra ilegales que no solicitan ninguna acreditación del producto.
GUARDIA CIVIL¿Cómo trabajan las patrullas que vigilan el campo malagueño?
Es un servicio que se realiza en toda España para prevenir robos en explotaciones agrícolas y ganaderas por medio de la vigilancia de la Guardia Civil a caballo.
