El Colegio de Educación Infantil y Primaria Nuestra Señora del Rosario, de la localidad serrana de Cortes de la Frontera, sufrió ayer por la mañana un corte en el suministro de luz por espacio de algo menos de dos horas, debido a la deuda que el Consistorio arrastra con la empresa y que oscila, según explicó su alcalde, el andalucista Antonio Granero, «entre 700.000 y 800.000 euros».

El regidor manifesta que la deuda «se debe a la gestión de la anterior corporación socialista». Granero definió lo sucedido como «un aspaviento entre la dirección del centro y la oposición» y matizó que «el corte de luz se produjo por espacio de poco más de una hora».

Lo cierto es que los padres de los alumnos del centro educativo se mostraron sorprendidos e indignados cuando al llevar a sus hijos al colegio se encontraron con que las instalaciones carecían de suministro eléctrico.

Además, no se trata de la primera vez en las últimas semanas que Endesa realiza esta acción en instalaciones municipales por la deuda que el Ayuntamiento de Cortes de la Frontera mantiene con la compañía. Pese a ello, el alcalde quiso aclarar que «se están siguiendo los trámites oportunos para poner fin a esta situación y tenemos previsto comenzar a saldar la deuda» gracias al plan de pago a proveedores puesto en marcha por el Gobierno central.

Alrededor de una treintena de padres se concentraron a las doce del mediodía ante las dependencias municipales para protestar por lo ocurrido y exigir soluciones al equipo de gobierno, aunque a esa hora la electricidad ya había vuelto a las instalaciones.

Varios padres señalaron que están dispuestos a manifestarse si esta situación, que calificaron de intolerable, «se vuelve a repetir».

Las mismas fuentes manifestaron entender la complicada situación por la que atraviesa económicamente el Consistorio, «pero una cosa es que no haya luz en edificios municipales que apenas tienen uso, y otra bien distinta que nuestros hijos no puedan asistir con normalidad al colegio», afirmó uno de los padres.

El pasado verano ya se produjo una situación similar en el colegio de la pedanía cortesana de El Colmenar, aunque se restableció el suministro de electricidad antes del inicio del curso.