La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha mostrado su apoyo a la familia de Lucía Garrido, que apareció muerta hace cuatro años en una finca de Alhaurín de la Torre, así como a la Justicia. Además, ha anunciado que pedirá al director general de la Benemérita, Arsenio Fernández de Mesa, la apertura "lo más urgente posible" de una investigación "imparcial y transparente" acerca de la actuación que llevó a cabo el instituto armado, después de que un juzgado haya decretado la reapertura de las diligencias previas en este caso, sobreseído en mayo de 2009 por falta de pruebas.

Así se ha pronunciado este lunes la junta directiva provincial de la AUGC después de conocerse, según informó la familia de Lucía Garrido, que las nuevas pruebas presentadas por la acusación particular, que han motivado la reapertura del caso, constituyen "indicios de connivencia con el exmarido de Lucía Garrido, principal sospechoso en calidad de inductor, y de corrupción y de contaminación de la investigación por parte de algunos de los agentes de la Guardia Civil que llevaron las diligencias de investigación".

Precisamente, el magistrado del Juzgado de Instrucción número 4 de Málaga, que ha determinado la reapertura de las diligencias previas ante un posible delito de homicidio, ha acordado que la nueva investigación la realice el Cuerpo Nacional de Policía, tal y como había venido solicitando la familia de la mujer.

Desde la AUGC, que representa a más de un millar de guardias civiles en la provincia de Málaga, han lamentado "profundamente" que "la actitud de algunos miembros de este Cuerpo, por acción u omisión, pueda empañar la honesta labor de los miembros de nuestra institución". En este punto, han advertido de que "no consentiremos ni toleraremos ninguna conducta corrupta que trate de ampararse en siglas, uniformes o falso compañerismo".

En este sentido, han señalado a Europa Press que, "en cumplimiento de lo que rigen nuestros estatutos, luchar contra la corrupción, y para preservar el fin por el que fue creada la asociación, así como para proteger la imagen de la Guardia Civil, nos vemos en el convencimiento moral de luchar para erradicar conductas presuntamente ilícitas".

La AUGC ha criticado que ciertos comportamientos puedan "perjudicar, no sólo al colectivo de los guardias civiles en general, sino injustamente desacreditar la honrada labor de la gran mayoría de los agentes destinados en la unidad de Policía Judicial, que realizan su servicio a la sociedad con absoluto respeto a la legalidad, muchas de las veces con riesgo de su integridad física o con jornadas interminables en condiciones muy difíciles y con medios insuficientes".

Sin respuestas. Han recordado que desde esta asociación han denunciado en reiteradas ocasiones "situaciones de supuestos ilícitos", que, sin embargo, "no han encontrado la respuesta que cabía esperar por parte de la Jefatura de la Comandancia de Málaga, zanjándose con informes reservados a los que se nos ha negado el acceso".

Por ello, han subrayado que, "a fecha de hoy, desconocemos los resultados debido a esa opacidad", añadiendo que, "en ningún caso se nos ha dado respuesta a nuestra petición, en contra de lo regulado en la Ley del Procedimiento Administrativo Común".

"Los guardias civiles tenemos muy claro que el sentido del deber nos situará siempre del lado de la Justicia y, como dice nuestro reglamento, deberemos ser siempre un pronóstico feliz para el afligido, y no esperar de ellos más que un mero recuerdo de gratitud", han manifestado desde esta organización.