La "extrema" sequía registrada en la provincia este año "está pasando factura al campo malagueño", el cual también ha sufrido heladas siberianas "constantes y repetidas", provocando "verdaderos estragos" en cultivos como el cereal, que verá mermada su producción un 50 por ciento, según han informado desde la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja).

Esta cifra puede alcanzar el 60 por ciento de pérdidas si se toma como referencia la cosecha del año pasado, que fue "especialmente buena", ha precisado Baldomero Bellido, técnico de Asaja Málaga, quien ha recordado que la provincia cuenta con una superficie cultivada de 40.000 hectáreas de cereales, que el año pasado produjeron 131.336 toneladas y facturó cerca de 30 millones de euros. Sin embargo, este año "parece que las cifras se verán seriamente menguadas".

Como ha explicado, la mayor parte del cultivo de cereales de la provincia se encuentra en Antequera, Guadalteba y Nororma, desde Almargen hasta Villanueva de Tapia, donde hay grandes extensiones de superficie de cebada y trigo duro. De estas tres subcomarcas, ha apuntado, sólo se salvaría de la merma Nororma por ser más tardía y haber aprovechado las lluvias de la primavera. En cuanto a la producción de trigo duro de regadío, no se verá tan afectada, pero su coste se ha elevado de forma "considerable".

También hay cereales en la Serranía de Ronda y, según explica el técnico de Asaja Málaga en Ronda, Rafael Cordero, la producción en esta comarca será prácticamente igual que la de otros años, ya que la altitud (se encuentra a 600-800 metros de altura), las temperaturas más frescas que en otros lugares y las escasas precipitaciones caídas en primavera han permitido que el suelo conserve "un buen porcentaje de humedad y que los cereales, milagrosamente y para asombro de los agricultores, hayan brotado con fuerza".

Lo cierto es, ha apuntado Cordero, que los agricultores "están sorprendidos, pues cuando casi daban la mitad de la cosecha por perdida han visto cómo han crecido de repente".

Precio. Por otra parte, han indicado desde Asaja Málaga en un comunicado, el precio sí es una preocupación común entre los agricultores malagueños, que "ven cómo se derrumba por momentos". "Si hasta hace un par de semanas los precios se mantenían en niveles aceptables, ahora cotizan a la baja y no hay síntomas de recuperación", ha manifestado.

Al respecto, han puesto como ejemplo el trigo, que se paga ahora a unos 25 céntimos el kilo, lo que supone un 13 por ciento menos que hace unos días. De igual modo, el precio de la cebada ha caído un 16 por ciento y ahora se paga a unos 19 céntimos el kilo.

El motivo que lleva a estas oscilaciones de precios en el mercado "siempre es una incógnita", han precisado, pues "en una sociedad cada vez más globalizada cualquier circunstancia de otro país productor influye de manera determinante en el nuestro". Así, el bajo precio del trigo podría explicarse por la buena cosecha que se espera de otros países competidores de España y también por la bajada en el consumo de pasta, han señalado.

En cambio, encontrar un motivo que justifique la caída del precio de la cebada "parece más complicado", ha comentado Bellido, precisando que este año se había sembrado especialmente la variedad maltera que es la que se utiliza para fabricar cerveza. "En un principio, la demanda se preveía alta y la producción escasa, la unión de estos dos factores hacía presagiar una buena cotización, sin embargo, una vez más, el campo parece vivir ajeno a las reglas básicas del mercado", ha concluido.