Cinco centros de discapacitados de la provincia cada vez tienen más difícil mantenerse debido a los impagos de la Junta de Andalucía, a los que debe más de 1,8 millones de euros. La situación en algunos centros, como en la asociación a favor de las personas con discapacidad en la Costa del Sol (Aspandem) en Marbella, es tan dramática que trabajadores, usuarios y familiares protagonizaron ayer un encierro como señal de protesta, desde las nueve y media de la mañana hasta las cinco de la tarde.

El Gobierno autonómico adeuda alrededor de un millón de euros a Aspandem, que cuenta con un total de 140 trabajadores y unos 600 usuarios. La deuda dificulta enormemente el desarrollo normal de su actividad, por lo que cerca de 100 personas se concentraron ayer en la sede en El Arquillo en señal de protesta.

Según su director general, José Juan López, estos impagos le impiden abonar las nóminas del presente mes «y de hecho no hemos podido hacer frente a la paga de verano». López indicó además que deben a proveedores cerca de 300.000 euros y que, ante esta situación, se plantean realizar distintas movilizaciones.

Junto a Aspandem, hay más centros de la provincia que atraviesan una situación muy parecida, como es el caso de Fuensocial en Fuengirola, Asprovélez en Vélez Málaga o Antequera Acoge y la Asociación de Alzheimer de Antequera a las que la Junta les debe en total 800.000 euros.

En Fuengirola, la Asociación de Discapacitados Fuensocial reclama un total de 349.506,86 euros a las consejerías de Empleo y Salud así como a la Agencia para la Dependencia y el hospital Costa del Sol. En el caso de este último, por el servicio de logopedia que dispensa la organización fuengiroleña a pacientes del centro hospitalario marbellí, mientras que en el caso de las otras entidades, por subvenciones para talleres y programas especiales, además de más de 34.000 euros para la contratación de dos diplomadas durante un año.

Con esta situación, el gerente de Fuensocial, Manuel Jesús Martínez, explicó ayer que el futuro de la entidad, fundada en 1982, está en el aire. «Llevamos tres meses adelantando las nóminas de nuestros 52 trabajadores, y de no llegar ese dinero pronto, podríamos enfrentarnos a un riesgo bastante grave».

La Junta de Andalucía debe también más de 300.000 euros a asociaciones sociales de Antequera, algunas de las cuales han tenido que suspender programas o dejar el alquiler de los locales por falta de fondos, según denunció el concejal de Asuntos Sociales, José Luque, que informó de la situación económica por la que pasan instituciones como la de Antequera Acoge y la Asociación de Alzheimer.

En el caso de la Asociación Protectora de Disminuidos Psíquicos de Vélez Málaga, Asprovélez, que lleva más de cuarenta años trabajando en el municipio, la deuda se cifra en más de 150.000 euros. Esta cantidad corresponde a los últimos tres meses y afecta a unos 33 trabajadores del centro, que atienden a los más de 70 usuarios del centro. El gerente de Asprovélez, Diego Borgel, señaló que con esta aportación, además de las nóminas «pagamos a los proveedores y los gastos de luz o de agua».

Fuentes de la Junta de Andalucía señalaron que existe un compromiso para abonar las diferentes cuantías solicitadas por los colectivos, en función de las necesidades presupuestarias.