Los vecinos de Valle de Abdalajís se manifiestan hoy en la estación María Zambrano de la capital en protesta por los continuos cortes de agua que viene sufriendo el pueblo tras las obras del AVE. Un problema que, aseguran, arrastran desde hace años y que comenzó con la rotura de la bolsa de agua que suministra a la localidad, para la construcción de un túnel.

«Desde que perforaron la bolsa de agua venimos sufriendo cortes en los grifos durante gran parte del día incluso en algunas zonas del pueblo durante todo el día», aseguró Antonio Bravo, uno de los afectados.

Los vecinos denuncian que hay épocas en las que las cubas de agua son insuficientes. «Tras muchos acuerdos entre el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y el Ayuntamiento, el ente ferroviario se comprometió a arreglarlo pero son incapaces de solucionar un problema que ellos mismos ocasionaron», asegura Bravo.

Insisten en que las fugas continúan. «Todavía escapan por la boca del túnel más de 30 litros por segundo, pese a los más de 50 millones de euros que un Consejo de Ministros autorizó para el sellado total del mismo», detalla la plataforma. A eso se suma la declaración que han hecho los vecinos de que el agua está contaminada. «Además denunciamos el incumplimiento de otros aspectos como la no información de la evolución del acuífero, ni de la supuesta contaminación por productos químicos», finalizan.

Los afectados, que se agruparon en la plataforma denominada Pro-manantiales de Valle de Abdalajís, retoman ahora la denuncia y volverán a llevar hoy a la burra Margarita -símbolo de su reivindicación- hasta la estación malagueña, a la espera de que haya una actuación por parte de Adif. «Hicieron un sondeo pero nada más, deben buscar una nueva forma de suministro».

Por su parte, fuentes de Adif se remiten al comunicado del 20 de agosto de 2012 en que mantienen su compromiso de encontrar una solución técnica adecuada y sostenible para el abastecimiento de agua al municipio de Valle de Abdalajís. El organismo, dependiente del Ministerio de Fomento, recordó que desde diciembre de 2007, y en virtud de los compromisos suscritos con el Ayuntamiento de Valle de Abdalajís, ha suministrado al municipio agua potable apta para el consumo humano.

Las mismas fuentes afirman que, desde la firma del convenio, Adif ha hecho un desembolso de más de 12 millones de euros, «la mayor inversión para asegurar que el agua que se filtra vuelve a los acuíferos. El agua que se filtra desde el acuífero a través de la infraestructura no se pierde», ya que «es devuelta a su cauce natural, depurada».

Por ello, consideraron que «su posible reutilización podría ser la solución más idónea y definitiva». Así, aseguran que están pendientes de que la Junta certifique que el agua es potable y pueda pasar directamente al consumo.