Siete personas ha sido detenidas por la Guardia Civil como supuestas integrantes de un clan familiar dedicado al robo de prendas de vestir en establecimientos comerciales de la provincia de Málaga y Sevilla, que posteriormente vendía la mercancía de forma ambulante.

A los detenidos, cinco mujeres y dos hombres, se les imputan los delitos de robo con fuerza, hurto, contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal, según ha informado hoy el instituto armado en un comunicado.

La operación comenzó el pasado septiembre a raíz de una denuncia de un hurto de ropa en un establecimiento de Campillos (Málaga).

Durante la investigación, los agentes localizaron un domicilio en la localidad malagueña de Sierra de Yeguas en el que intervinieron diversas prendas de marcas reconocidas, algunas de ellas aún con los dispositivos de alarma puestos, así como 490 gramos de cogollos de marihuana.

Las prendas sustraídas pertenecían a comercios de la zona norte de la provincia de Málaga y de Sevilla.

Los autores de estos hechos, todos ellos miembros de una misma familia, se dedicaban a visitar en grupos de tres o cuatro los establecimientos y mientras uno distraía a las dependientas, los otros hurtaban las prendas.

Para ello, introducían la ropa en cajas o carros de compra que previamente habían forrado artesanalmente para inhibir la frecuencia de las alarmas, y luego ofrecían la mercancía por las casas o en la calle.

Los detenidos, algunos con antecedentes policiales por hechos similares, fueron puestos a disposición del Juzgado de Antequera