El calvario que han vivido los 13 despedidos del parque eólico de Campillos ha concluido y además, «con final feliz», según afirmó ayer a este diario Alejandro Peramo, representante de los trabajadores. Peramo afirmó que la jueza encargada del caso ha declarado nulos los 13 despidos que se produjeron en la eólica de Campillos por parte de la subcontrata portuguesa EFASEC, después de que ésta se hiciera cargo de la central tras la marcha de la empresa GES.

Al realizarse el cambio de subcontrata, EFASEC entregó a los trabajadores un documento donde explicaban y reconocían el derecho de los trabajadores a ser contratados.

Sin embargo, acto seguido le informaron de que estaban despedidos aludiendo a una supuesta «excedencia de personal». Sin embargo, poco después contrataron a 19 personas.

Ante esta situación, según explicó su representante Alejandro Peramo, «los trabajadores intentaron llegar a un acuerdo con la empresa por el camino del diálogo», y convocaron manifestaciones como la de Madrid, o el campamento de 61 días a la intemperie que levantaron a las puertas de la empresa Gamesa en Torremolinos.

Ahora, después de tanta lucha y tanto esfuerzo, los trabajadores no pudieron ocultar las lágrimas cuando ayer les comunicaron el fallo judicial.