­El Juzgado de lo Penal número 7 de Málaga ha dictado una sentencia condenatoria contra el exalcalde de Alozaina Antonio Blanco, como consecuencia de aprobar la concesión de hasta 37 licencias de obras en suelo no urbanizable «sin documentación ni procedimiento alguno», además de contar con informes negativos de los técnicos, apenas tres días antes de entrar en vigor la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA).

El exregidor de IU resulta condenado de esta forma por un delito de «prevaricación urbanística con la atenuante de dilaciones indebidas». En la sentencia figura una pena de diez meses de prisión, que será sustituida por una multa de ocho euros diarios durante 20 meses -4.800 euros en total-, y un total de diez años de inhabilitación especial para el ejercicio de empleo o cargo público de carácter electivo, como consta en la sentencia.

En enero de 2003, el entonces alcalde, junto a un edil ya fallecido, concedieron en comisión de gobierno 37 licencias de obras, según ha podido demostrar el tribunal. En concreto, fueron los permisos para 26 viviendas unifamiliares aisladas, en suelo no urbanizable «según la normativa y los instrumentos de planeamiento urbanísticos».

En el fallo se recoge que los acuerdos adoptados fueron aprobados en una sesión posterior, «por tanto, una vez en vigor dicha ley cuya aplicación se pretendía eludir», aunque se añade que los requisitos de la concesión de licencia de obras en suelo no urbanizable «no variaban fundamentalmente» de los que existían con anterioridad.

Al inicio del juicio, el acusado y su defensa se mostraron de acuerdo con el relato de hechos realizado por el fiscal y la acusación particular, así como con la calificación jurídica de los hechos y las penas solicitadas, por lo que se dicta una sentencia de conformidad que es firme ya que todas las partes expresaron su deseo de no recurrir.

En la documentación aportada durante la causa se indica que, con independencia del régimen jurídico anterior y posterior, ya aprobada por la Junta de Andalucía la actual LOUA, las acciones que tuvieron como protagonista al alcalde ahora condenado «prescindieron deliberadamente de todos los procedimientos legalmente previstos para la concesión de licencias de obras para viviendas unifamiliares aisladas en suelo no urbanizable, contando incluso con informes desfavorables del técnico municipal y del secretario».