Jesús Vázquez, «después de más de un cuarto de siglo en las filas del Partido Popular», iniciará esta semana una «nueva vida» como político. Este veterinario de 50 años de edad será el encargado de sustituir a Margarita del Cid como diputado nacional por Málaga dentro de su formación. Desde mañana, una vez que haya mantenido sus primeras reuniones de trabajo en Madrid, compaginará las delegaciones de Relaciones Institucionales, Desarrollo Rural y Agricultura y Ganadería en el Ayuntamiento de Ronda con una labor que considera como una «culminación» a su entrega a la política.
¿Cómo resumiría su trayectoria en los dos municipios donde ha tenido acta de concejal?
Sumo ya un cuarto de siglo de servicio al ciudadano, compaginando esta labor con la de veterinario de salud pública. Primero fui concejal en Pujerra, donde estuve 16 años. Ya en ese tiempo fui dos legislaturas diputado provincial. Y luego me vine a Ronda, de donde soy, y estoy en mi segundo mandato. Ahora se acaban de dar las circunstancias y seré diputado nacional. Es una cosa nueva. Nunca imaginé que iba a llegar al Congreso. Pero afrontaré esta nueva responsabilidad con naturalidad.
Usted empezó muy joven en esto de la política. ¿Qué consejo le daría a esas generaciones que empiezan a incorporarse a los distintos partidos, teniendo en cuenta la coyuntura actual?
Lo mío fue precocidad. Empecé en 1979 en las Juventudes de la UCD. Apenas tenía 13 o 14 años. A los jóvenes les doy un único consejo: que sean honrados y decentes y le pongan cariño.
Málaga ha sido precisamente una de las provincias que en municipios como Marbella más ha sido azotada por la corrupción. Ni siquiera Ronda se ha librado de ocupar portadas.
Esta ciudad ha vivido momentos delicados en este sentido y todavía hay procedimientos abiertos. Desde luego que no soy nadie para juzgar, pero sí que este municipio se ha visto envuelto en escándalos.
Desgraciadamente la corrupción está en todos los partidos y está claro que hay que eliminarla. Porque el daño es tremendo. También en política, los garbanzos negros, como las ovejas, son los que más se ven. Hay mucha más gente honrada, pero son los corruptos los que terminan por extender su imagen.
Y así aparecen nuevos movimientos ciudadanos con vocación de partidos mayoritarios.
Se han estado agolpando numerosos casos, que incluso implican a empresarios y sindicalistas. Pero si nos referimos a Podemos, frente los movimientos populistas que están apareciendo en estos últimos tiempos, lo mejor es extirpar de raíz esta corruptela que no entiende de siglas. Y que la honradez esté por delante de todo. Los partidos tenemos códigos éticos y lo que tenemos que hacer es no bajar la guardia.
¿Qué espera del año que tiene por delante como diputado?
Me planteo este nuevo periodo con mucha ilusión, con muchas ganas. Quiero hacerlo lo mejor posible, para mi provincia y también para Ronda y su comarca.
¿Alguna iniciativa que usted ya tenga pensada?
Acabamos de inaugurar un centro integral para fortalecer el sector del vino en Ronda. Tenemos más de 23 bodegas familiares y he pensado que lo primero que plantearé será hacer una cata de vinos en el Congreso. Pero pondré toda la carne en el asador para resolver la mejora de la línea ferroviaria entre Bobadilla y Algeciras, fundamental para nuestra ciudad, y lucharé para poder eliminar los pasos a nivel en nuestro municipio.
