Las 40 familias de una zona rural del Valle de Abdalajís esperan que entre ésta y la próxima semana la empresa pública Aguas de los Verdiales lleve a cabo la conexión de agua a sus viviendas después de años de lucha y tras el compromiso alcanzado ayer. Por ello, han desconvocado la huelga de hambre prevista para este miércoles tras conseguir el compromiso de los ayuntamientos de Antequera, Casabermeja, Almogía y Villanueva de la Concepción, a los que pertenece esta empresa que actualmente se encuentra en concurso de acreedores.

El Ayuntamiento de Antequera ha sido el último en comprometerse a firmar el convenio, ya que cuando la empresa pública entró en concurso de acreedores el actual regidor, Manuel Barón (PP), pidió a los grupos de la oposición (PSOE e IU) la unanimidad en el acuerdo del pago de la deuda que fue rechazada, «cuando ellos generaron la deuda en anteriores mandatos».

Ahora el Consistorio antequerano y el PSOE han alcanzado un acuerdo, según informó ayer el alcalde del Valle de Abdalajís, Víctor Castillo, lo que facilitará al fin que el suministro de agua llegue a la zona rural del Valle.

«Espero que no haya más imprevistos en el camino. Este era el último escollo, pero ya no me fio de nada» apuntó Castillo.

«No tiene nombre lo que están haciendo con nosotros» señaló el portavoz de los vecinos, Antonio Bravo, quien aseguró que si el próximo lunes no se cumple con el compromiso alcanzado volverán a convocar la huelga de hambre y el encierro.

Bravo lamentó la situación tan incómoda en la que viven las familias y seis ganaderías: «es tercermundista». Asimismo, se quejan por el dineral que se están viendo obligados a pagar por las cubas de agua, cuyo coste asciende a unos 75 euros.