­El pasado mes de agosto la situación de irregularidad en la que se encontraba la Planta Municipal de Tratamientos de Escombros de Archidona llevó a su cierre por el nuevo equipo de gobierno, tras la apertura del expediente sancionador de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. Carecía de permisos medioambientales, situación que desencadena en el futuro pago de 24.000 euros de las arcas municipales.

«El Ayuntamiento no tenía permiso para esta actividad, lo que nos supone pagar una importante cantidad de dinero por ese error que no se subsanó a tiempo», lamenta la alcaldesa, Mercedes Montero (PSOE), quien anuncia que la sanción ha sido reducida por la Delegación de Medio Ambiente en Málaga, «porque han visto voluntad desde el Ayuntamiento para regularizar esta planta».

Y es que la carencia de permisos, considerada grave, podría haber supuesto una multa de entre 240.000 y 2,5 millones de euros. A pesar de la reducción de la multa el Consistorio seguirá presentando alegaciones para reducir la sanción.

La Planta de Tratamiento de Escombros se situaba sobre un antiguo vertedero y posteriormente una escombrera que fue sellada en 2011. La denuncia interpuesta por Medio Ambiente llegó en febrero de 2015, de modo que la regidora de Archidona estima que al menos durante dos años la planta estuvo en situación de irregularidad, «no moviéndose un dedo por el anterior gobierno (IU-PP), tan sólo presentó alegaciones, pero no cerró. Ellos sabían que allí no se podía hacer absolutamente nada ¿por qué lo hicieron?».

La planta no puede ser legalizada al ubicarse sobre un antiguo vertedero ya sellado, por lo que se buscará otro emplazamiento. De momento, los escombros son depositados en cubas para ser llevados a un municipio cercano.

«Se gastó la Diputación un dinero en sellarlo y ni cortos ni perezosos le dieron permiso a una empresa», concluye el edil de Medio Ambiente, Pablo Gálvez.